Ciertamente, la humedad y el moho en las paredes de casa nos han afectado en algún momento de nuestra vida, pero podemos pensar que no es tan malo como para invadir una determinada zona de nuestro hogar. Pero no es así en absoluto: cada caso es diferente y debe ser valorado individualmente por un profesional.
Recuerda que la mayoría de las casas están construidas con una estructura de cimientos en contacto directo con el suelo, por lo que la humedad siempre está presente. Sucede que con el tiempo la mampostería absorbe la humedad que sube por las paredes y forma moho.
Cuando notamos el problema en las paredes, generalmente intervenimos inmediatamente con limpieza y pintura para que las paredes vuelvan a parecer nuevas. Sin embargo, la realidad es que a medida que pasan los meses y los años, la humedad regresa y arruina el ambiente del hogar.
A continuación se presentan una serie de recomendaciones prácticas para solucionar finalmente este problema:
Talco para eliminar la humedad.
Aunque parezca extraño, el talco es sin duda un fiel aliado en la lucha contra la humedad. Piensa en cómo un poco de talco elimina la humedad de tus zapatillas o zapatos, porque de la misma manera puede ayudar a combatir el moho en las paredes.
Para ello, simplemente espolvorea el talco en la pared y luego frota con un paño para que penetre.
Repite el proceso varias veces para aumentar el efecto hasta que desaparezca todo rastro de humedad.
Quitar el moho con lejía
En este caso la solución es un alivio, pues con este método se elimina por completo el moho, pero la humedad permanece en el interior de las paredes.
Primero mezclamos una parte de lejía con una parte de agua y luego la ponemos en una botella con atomizador. También asegúrese de usar guantes de goma, gafas de seguridad y una mascarilla. Por último, cogemos un cepillo, pulverizamos y frotamos enérgicamente.
Hay que tener paciencia porque llevará algo de tiempo, hay que hacer un poco cada día o cada semana porque el olor es muy fuerte e incluso puede provocar mareos. Otra medida que debemos tomar es hacerlo sin gente alrededor y en un ambiente muy ventilado.
Una recomendación importante: Si utilizamos lejía en paredes de colores, estas se desvanecerán. Es un truco diseñado específicamente para paredes y superficies blancas.
Quitar el moho con peróxido de hidrógeno.
Otra alternativa de producto que puede ayudar con el moho es el peróxido de hidrógeno. Sin embargo, es mejor para manchas más pequeñas, ya que requiere un poco más de trabajo.
Simplemente empapa un paño con agua oxigenada, colócalo sobre el molde a humedecer y déjalo actuar durante 15 minutos. Luego frotamos bien hasta que salga.
Este producto también requiere el uso de guantes y mascarilla protectora y prestar atención a la ventilación del ambiente.
No permitimos que los niños accedan al dormitorio durante el procedimiento.
Quitar el moho con agua, vinagre y alcohol.
Para obtener una mezcla más casera que no manche la pared, existe un método más sencillo.
Puedes mezclar agua tibia con 1 taza de vinagre y 1 taza de alcohol isopropílico. Cuando se mezclan y mezclan adecuadamente, mitigan el moho, eliminan las manchas y promueven la limpieza.
Elimina la humedad corrigiendo la estructura.
Si quieres deshacerte permanentemente de la humedad y el moho de tu hogar, debes buscar otras soluciones. Para ello es imprescindible asesorarse de un profesional que valorará la estructura de la casa y nos ayudará a encontrar la mejor solución.
Una vez identificada la causa, llega la solución. Suele consistir en retirar el yeso actual y rehacerlo. En este caso, se utiliza un líquido de impregnación en la nueva mezcla de yeso.
En algunos casos, si el problema viene desde abajo, puede ser necesario derribar el primer metro de pared y renovar esta parte con una alfombra impermeable.
No hay por qué derribar todo el muro, sólo el fondo y poco a poco. Cuando esta parte está protegida, la parte superior ya no absorbe humedad del suelo.
Otros métodos de eliminación de la humedad que también pueden funcionar para ti
La sal marina es muy eficaz contra la humedad porque tiene una función similar al bicarbonato de sodio. Además, es muy fácil de usar, simplemente colocas recipientes de flor de sal o flor de sal en la base o estantes de las paredes y listo, comienza a absorber toda la sal. Humedad gradualmente.
El bicarbonato de sodio se puede utilizar del mismo modo que la sal marina. Simplemente coloque recipientes cerca del punto húmedo de las paredes y verá los resultados en poco tiempo.
El aceite de árbol de té también es un gran truco para eliminar las paredes húmedas. Para ello basta con mezclar dos cucharadas de este aceite con dos tazas o jícaras, mezclar bien los ingredientes y luego aplicar en las zonas húmedas.
Fuente: www.trucosfaciles.info