"Es una tristeza", lamenta la ciencia salteña los recortes de Nación y la fuga de cebreros

El sector científico argentino alzó su voz en la Cámara de Diputados de la Nación para expresar su profunda preocupación por el desfinanciamiento que está paralizando la labor de los investigadores, llevando al abandono de proyectos cruciales y provocando la renuncia de profesionales que buscan oportunidades en el sector privado o en el extranjero. 

Al respecto de este tema, InformateSalta habló con la Dra. Mónica Farfán Torres, investigadora del CONICET quien describió con claridad el panorama actual: "Venimos en retroceso desde diciembre del 2023, momento en que asumieron las nuevas autoridades nacionales, porque evidentemente ellos tienen una visión de la ciencia que es muy distinta a la que ha estado primando en Argentina desde mucho tiempo atrás".

Según ahondó, el impacto se manifiesta en varios frentes: "Por un lado, el desfinanciamiento total de las actividades. Por el otro, el congelar totalmente los ingresos de nuevo personal". Esta inacción en la incorporación de nuevos talentos sumada a la falta de recursos para llevar adelante las investigaciones, genera un clima de incertidumbre y dificulta el avance del conocimiento.

El Gobierno Nacional recorta fondos a investigaciones científicas también en Salta

La situación salarial también es crítica, tal como lo explica la investigadora: "Hay un franco retroceso en los salarios que se le paga tanto a becarios como investigadores y profesionales de apoyo a la carrera de investigador".

La gravedad de estas aristas está generando una fuga de cerebros: "Es un impacto muy fuerte en el que está el sistema científico, de hecho está produciendo una migración masiva de gente joven al exterior, se tienen que ir para poder seguir haciendo su trabajo o por lo menos que no se pierda todo, no les queda de otra".

La frustración y la tristeza son sentimientos palpables en la comunidad científica, según señaló la profesional: "Es una gran tristeza, yo veo los becarios que teníamos, que tenemos en Conicet, que se seleccionan también de una forma durísima, que están renunciando para irse a trabajar a otro lado porque tienen ingresos por debajo de la línea de pobreza. Eso les están pagando". 

“Esta situación está produciendo un agotamiento, hay tristeza por lo que uno ve cómo se destruye todo”