Leavy y Vilariño se quedaron solos en el Partido de la Victoria
Las apetencias personales, las ambiciones desmesuradas y una sobrevalorada autoestima, llevaron a que los pesos pesados del kirchnerismo en Salta quederan casi sin el acompañamiento de ninguna figura política en la provincia.
A una semana del Congreso en el que el Partido de la Victoria con todas su autoridades acordó conformar un nuevo frente político con otros partidos que tengan la misma sintonía, parece que todo quedó en la nada.
Sergio Leavy, presidente del Partido de la Victoria e intendente de Tartagal, junto a su ladero y secretario General del Partido, José Vilariño, no supieron contener a su tropa. Al parecer, muchos asintieron sin entender lo que significaba el alejamiento del Frente Oficialista, encabezado por Juan Manuel Urtubey.
Con el paso de las horas fueron cayendo en lo que habían votado, y muchos empezaron a recalcular y volverse atrás en su decisión. Y no se trata de dirigentes ingenuos ni novatos. Hablamos de la senadora Silvina Abiles, quien a su vez es Presidenta del Congreso del PV; al menos 6 intendentes como ser Rubén Méndez de Salvador Mazza; Mario Aramayo de La Viña; Mario Cuenca de Campo Santo y presidente del Foro de Intendentes; Roberto Vázquez de San Carlos y a su vez vicepresidente primero del partido; el “Rata” Martínez de El Bordo; y Daniel Moreno de Vaqueros. También estaban algunos concejales de esta fuerza y otros dirigentes de toda la provincia.
Más solos que Luis D´Elía el día del amigo
Es decir, tanto Leavy como Vilariño, los dos impulsores de este quiebre, deberán conformarse con su amistad con Máximo Kirchner; la cercanía con Andrés “Cuervo” Larroque, el jefe de La Cámpora, o su adhesión a Cristina para tratar de arrimar algunos votos. O quizás sus nuevos socios, como el MPU, Cabildo Abierto, Frente Grande o Kolina puedan darles los nombres necesarios para poder al menos, completar las listas para las elecciones de este año.
Ellos dicen tener los votos necesarios como para bancar este portazo. Incluso afirman a viva voz ser la segunda fuerza en la provincia, y hasta se animaron a decir que Urtubey ganó gracias a ellos. Es más, Leavy confía en que su principal bastión, la ciudad de Tartagal, se volcará masivamente a favor del Partido de la Victoria este año.
Pero hay otros no tan convencidos, como Roberto Vázquez, hasta ahora vicepresidente primero del Partido de la Victoria, quien justificó su decisión de hoy diciendo que apoyan el proyecto del gobernador. “Creo que este es el lugar donde debemos estar. Estamos acá porque estamos convencidos que es el proyecto que les conviene a los salteños", dijo.
Es de esperarse un éxodo masivo y una catarata de renuncias en el Partido de la Victoria a partir de mañana.