Voladura de techos y caídas de carteles, las consecuencias de la tormenta
La fuerte lluvia se desató pasadas las 4 de la mañana en Capital y alrededores. En San Lorenzo cayó granizo. En tanto, en el interior la lluvia llegó con fuertes ráfagas sin mayores inconvenientes.
Un alerta meteorológico se activó en las últimas horas de ayer, indicando fuertes ráfagas, precipitaciones y posible caída de granizo. La misma se hizo efectiva desde la madrugada en Capital iniciando con fuertes vientos.
Según Defensa Civil los principales daños fueron voladuras de chapas en los barrios Divino Niño, Norte Grande, Solidaridad y Castañares. Además, personal policial colaboró con la auto evacuación de vecinos del asentamiento Urkupiña y B° Solidaridad pero en viviendas de familiares o amigos.
“Ya están regresando y arreglando lo provocado por la voladura de techos” indicó el Subsecretario de Defensa Civil, Ernesto Flores a InformateSalta.
Por otra parte, Prevención y Emergencia confirmó la caída de árboles en Vicente López y Tamayo, Lerma y Mendoza, Av. Bicentenario, Independencia entre San Felipe y Santiago y Tres cerritos.
“La cantidad de agua fue muy poca hasta el momento se midieron 9 mm. Sí las ráfagas de viento fuerte superó algunos kilómetros importantes. Son las características que vamos a tener de las lluvias, cortitas con ocasional caída de granizo” sostuvo a InformateSalta, el subsecretario de Prevención y Emergencia, Nicolás Kripper. Aún así la colectora de Ciudad Judicial se anegó totalmente como con cada lluvia en Salta.
Posterior a la tormenta, se produjeron varios cortes de luz en diferentes zonas pero el servicio fue restableciendo con el pasar de las horas. “Hubo postes que chispeaban y quisieron prenderse fuego pero con el aviso rápido de la gente, EDESA concurrió al lugar” afirmó Flores
En el interior
En San Lorenzo la tormenta llegó también con granizo pero sin daños graves. En Metán, Anta, Cerrillos y Tartagal se sintieron vientos fuertes, tampoco sin consecuencias.
Recomendaciones antes las tormentas
- Fijar los elementos que se puedan despedir.
- No salir durante el fenómeno meteorológico, para evitar lesiones.