Hartos de que no escuchen sus reclamos, alumnos de la Escuela de Bellas Artes “Tomás Cabrera”, ubicada en barrio El Huaico, realizaron una sentada pacífica para pedir soluciones urgentes a diferentes problemáticas, entre ellas, la falta de limpieza de la institución, la separación de un docente de Ética al que acusan por hechos de acoso, y que los baños se mantenga abiertos durante el horario de clase.

Al respecto, Candelaria Vélez, de 4to año, ante las cámaras de InformateSalta, explicó que la institución tomó la decisión de cerrar los baños para evitar el consumo y comercialización de drogas, hecho que consideró injusto. “Si saben quiénes son los que se drogan, deberían expulsarlos, porque no es justo que las cosas estén así por culpa de unos cuantos”, señaló.

Con respecto a la denuncia contra un docente por acoso, consideró que se trata de una situación aberrante, que viene sucediendo desde hace más de 5 años. “Una compañera, en compañía de sus padres, denunció todo lo que sucedía, pero el profesor sigue dando clases, por lo visto no lo suspendieron, y no lo van a suspender”, se quejó.

“Yo lo tengo a ese profesor y sinceramente me siento incómoda que venga con el cierre abajo, me da asco”, dijo otra de las alumnas consultadas, quien manifestó que continuarán con las medidas hasta tanto les brinden soluciones, a la vez que indicó que son víctimas de persecuciones y amenazas. “Nos dijeron que nos iban a poner faltas a los que estemos presentes en la sentada”, señaló.

Asimismo hizo hincapié en la falta de limpieza. “Me da asco entrar a los baños, están sucios, creo que lo limpian una sola vez a la semana, dos veces como mucho, y también los cursos”, expresó.

A su turno, José Farfán, director de la institución, se refirió a la falta de higiene y adelantó que ya se tramitó la designación de ordenanzas. “Teníamos un plantel de 5 ordenanzas en 2015, y ahora solamente quedan 2 que me abarcan el turno mañana, y nosotros nos extendemos en jornada hasta las 16.30”, se excusó.

También se refirió a la denuncia contra el docente y señaló que es necesario que un adulto avale los dichos de los menores. “El año pasado se hizo presente la mamá de una alumna, y se elevó los testimonios al ministerio de Educación que deberá dictaminar si hay motivo para iniciar un sumario. Todavía no se dictaminó nada”, confirmó.

En cuanto a los baños, dijo que se tomó la decisión de cerrarlos en horarios de clases en pos de las denuncias de propios alumnos y padres sobre situaciones de consumo, pero aclaró que el alumno que tenga una necesidad puede ir a la preceptoría solicitar la llave y hacer uso del baño.

Por último, Amelia Flores, supervisora de núcleo, manifestó que  desde el año pasado se lleva adelante el trámite contra el profesor acusado de abuso, pero insistió en que cuando hay un tipo de denuncia tan grave, es necesario que los padres también intervengan en la vía legal. “Nosotros intervenimos en la vía administrativa”.

En el mismo sentido dijo que no tienen ninguna denuncia escrita por parte de los padres. “Nosotros actuamos de oficio, y se elevó a jurídico para que ellos determinen y dictaminen cual es el procedimiento a seguir, hasta el momento no lo pudimos corroborar, hemos hecho observaciones de clases, y voy a pedir informes a otras instituciones”, finalizó.