Un sacerdote se opuso a la visita de Macri y recibió una catarata de insultos
El presbítero Raúl Méndez consideró inoportuna la llegada del presidente durante el Milagro y contó que lo atosigaron por redes sociales. “Me inventaron un pasado y un presente totalmente ajeno,” dijo.
La llegada del presidente Mauricio Macri durante la fiesta del Milagro generó opiniones divididas dentro de la Iglesia. El presbítero Raúl Méndez fue uno de los que se manifestó en contra y fue muy criticado por redes sociales.
“Cuando salió mi declaración, me han atosigado de mensajes de insultos. Yo a eso no lo había vivido nunca pero descubrí las redes sociales. Las cosas que han inventado, a tirarme un pasado y un presente totalmente ajeno. He aprendido que problemas, que monstruos que hay en esta tecnología,” dijo a FM Aries.
En este sentido, indicó que cuando comenzó a circular el rumor de la venida del mandatario nacional, un grupo de laicos y sacerdotes se juntaron a conversar y llegaron a la conclusión que no era oportuno en la circunstancia en la que se daba.
“No es un agravio al Presidente ni desconocer su investidura, era simplemente considerar que el es candidato en un proceso electoral en marcha, que está muy conflictuado, hay mucha crispación y que no era oportuno, nos parecía, porque podía provocar reacciones de quienes no lo ven favorablemente, que podía tener un mensaje político y que no era el escenario,” expresó.
Asimismo subrayó que expresaron su opinión tratando de evitar que se empañe una celebración que es de Salta, que suele transcurrir con normalidad, y no querían que esta vez pudiera volverse “ríspida.”
“Con ese afán de prevenir, de evitar un problema, hasta nos comunicamos con personas que están muy cercanas al presidente sin saber que eran quienes estaban en realidad diseñando esta venida. El objetivo era dar una imagen distinta del presidente respecto a lo religioso. Es un significado político electoral, entonces no corresponde. Mi opinión no prevaleció y bueno, las cosas se hicieron,” manifestó.
Finalmente agradeció que la llegada de Macri no haya opacado la muestra de fe más grande Salta. “Gracias a Dios no pasó nada. La parte central religiosa se desenvolvió, si hubo un grupo partidario que fuera de lugar, que se instaló en la puerta de la Curia sobre la calle Mitre y el presidente fue ahí a saludar, pero era una cosa pequeña. Gracias a Dios no pasó lo que podía haber pasado,” aseveró.