Sociedad Por: InformateSalta26/12/2021

En la Armada Argentina “todos los días aprendo algo nuevo”

La Cabo Principal Apoyo General Mirta Aurora Calpanchay es conductora de vehículos en la Dirección de Relaciones Institucionales de la Armada, tiene 33 años y es oriunda del paraje El Barrialito (Catamarca) donde vivió hasta terminar sus estudios primarios. Luego, se mudó a San Antonio de los Cobres (Salta) donde realizó el secundario y allí estuvo, hasta su ingreso a la Armada Argentina en el 2010.

La joven cabo catamarqueña contó que el primer acercamiento hacia las Fuerzas Armadas fueron las historias y experiencias que escuchaba de sus tíos cuando era chica. “Si bien tuve familiares que estuvieron en la milicia obligatoria, fue algo inesperado para mí entrar a la Armada Argentina”, introdujo la Cabo Calchampay.  

Un día escuchando la radio de San Antonio se enteró que la Delegación Naval iba a ir hasta esa localidad salteña a brindar una charla informativa. Relató que ese día se levantó decidida a participar de la reunión, lo hizo, y al día siguiente, presentó todos los papeles para la inscripción entusiasmada. 

Su familia no supo nada de esto hasta después de su ingreso. Actualmente, Mirta Calpanchay aseguró que ellos como ella, se sienten muy orgullosos de la profesión que eligió.  

La joven asegura disfruta mucho de su vida naval sin embargo, cada licencia que tiene aprovecha para visitar a sus afectos y pasear por su Barrialito natal. Manifestó que lo que más extraña de su provincia es “la tranquilidad, la humildad de su gente y el hecho de conocerse todos en el pueblo”.  

11 años después de su ingreso a la Armada Argentina, la Cabo Principal Apoyo General se encuentra de pase en la Dirección de Relaciones Institucionales de la Armada (DIRI) en el Edificio Libertad en Buenos Aires, donde se desempeña como Conductora del Comandante del destino.  

La especialidad Naval de Apoyo General (AG) agrupa al personal militar de servicios, como son los peluqueros, cocineros, camareros y conductores, entre otros, de la Armada.  

En relación a las actividades cotidianas de su cargo, su función principal es conducir hacia diferentes lugares desde su destino en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) o en comisiones fuera de la ciudad. También se encarga del mantenimiento general del vehículo. 

Del norte argentino al mar 

“Ahora me veo y digo, 11 años que integro la Armada…”, reflexionó casi sin creerlo y habló sobre sus destinos navales anteriores. 

El primero fue también en el Edificio Libertad pero en el Cuartel General del Estado Mayor de la Armada (CUEM) donde estuvo 3 años. De allí, la destinaron a la Jefatura de Políticas, Estrategias y Orgánica de la Armada (JEPE) y posteriormente le salió destino a la Base Aeronaval “Almirante Zar” en Trelew (Chubut) donde estuvo 5 años hasta el 2020. 

Este año, Calpanchay ascendió a la jerarquía de Cabo Principal y ya hace casi un año, que está destinada en la DIRI. “Mi responsabilidad es saber cómo llegar a los lugares designados, con el objetivo de ir y volver bien”, ajustó.  

En referencia a lo que más disfruta del ámbito naval, opinó sin dudar, que es la posibilidad de aprender cada día. “Todos los días estoy aprendiendo cosas nuevas y es lo que me incentiva a seguir otro día en la Armada. Y seguro me queda mucho por aprender”, aclaró. “Aprendo sobre mi especialidad; del vehículo en sí, de motores y mecánica; y también conozco nuevos lugares”, detalló. 

A la hora de hablar de sus mejores experiencias en su paso por la Institución, definió que estar de pase en el sur fue una de ellas. “Trelew, es un mundo totalmente diferente”, confesó. Allí, en la Fuerza Aeronaval N° 3, se desempeñó también como chofer del Comandante y ocasionalmente cubría guardias en Automotores: “Cuando estaba en Trelew tuve la posibilidad de manejar vehículos más grandes que un auto o una camioneta, por ejemplo, un colectivo o una combi.”. 

Incluso mientras se encontraba de pase en la Base Aeronaval “Almirante Zar”, Mirta terminó una Tecnicatura, en Higiene y Seguridad en el Trabajo, aunque aún no ha podido ejercerla.  

Respecto a la vida militar, Mirta Calpanchay se siente sumamente orgullosa de su crecimiento personal y profesional porque “ingresar en la Armada no fue algo que hubiera planificado para mi vida. Es el día de hoy que yo misma me sorprendo, no tenía totalmente el conocimiento de lo que significaba pertenecer a la Armada y acá estoy”. 

Además de disfrutar de su especialidad, de aprender cada día algo nuevo, destacó la camaradería como un fuerte valor marinero: “En el despliegue de toda la Armada, hay gente de todas las provincias; de ellas rescato experiencias, culturas, historias de otras personas, el compartir experiencias; y eso es camaradería”

En su tiempo libre, la catamarqueña hace deportes: “Mi pasatiempo favorito es jugar al fútbol y salir a correr”. 

En cuanto a expectativas para el futuro en su carrera naval, la marina catamarqueña expresó: “Seguir para adelante, seguir aprendiendo tanto en mi vida personal como del ámbito naval”.