Sociedad14/07/2022

Habló la mujer de Alejandro Benítez: “Unos monstruos lo dejaron morir sin atenderlo”

A la docente Claudia Vilte, Claudiña para sus amigas y compañeras de trabajo de la escuela de nivel primario Lilia Cardozo de Mariño de General Mosconi, la única fuerza que le queda se la da la bronca, el coraje por haber perdido a su compañero de toda la vida y padre de sus cuatro hijos en circunstancias totalmente evitables. La última vez que habló con el profesor Alejandro Benitez fue un momento antes que sufriera un grave accidente de tránsito en una ruta de Bolivia con destino final en Cochabamba, y que perdiera la vida por falta de atención médica.

La familia en general ya casi no quiere hablar del tema y si Claudia lo hace, como ella misma lo reconoce, "es para que a ninguna otra persona le pase lo que a mi esposo". "Y no estoy hablando solo de la inhumanidad de quienes no quisieron darle atención médica, sino de la corrupción que sufren las víctimas como le sucedió a mi esposo", manifestó a El Tribuno.

Claudia se refiere así a que el personal de salud del pueblo de Ivirgazama donde fue trasladado después de haber sido colisionado de atrás por un camión de gran porte, no quiso atenderlo por no tener suficiente dinero boliviano; pero además a su esposo la policía le sustrajo el efectivo que llevaba consigo.


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"Mi esposo no se iba a ir sin plata; él llevaba 25 mil pesos argentinos que cambió y le dieron 700 bolivianos. Me lo dijo a mí por teléfono y los amigos aseguran que antes del accidente prácticamente no habían gastado en nada. Pero cuando a mi familia le entregaron sus pertenencias la policía le devolvió 40 pesos bolivianos y de ahí le hizo quedar 30 porque dijo que era para pagar los gastos que habían tenido por el tema del accidente. A la actitud de esos monstruos que lo dejaron morir sin atenderlo, se suma esa corrupción con una persona que ya estaba muerta", expresó

Claudia recuerda que su esposo tenía pensado ir a Santa Cruz de la Sierra, pero cambiaron el itinerario. "No sé muy bien los detalles porque hablar por teléfono con él era dificultoso porque la comunicación telefónica no era buena, había muy poca señal. Cuando hablamos -pocos minutos antes de ser colisionado por un camión- porque casi por milagro entró esa llamada, me contó que temprano habían desayunado con los otros motociclistas en un pueblito chiquito; me contó que había cambiado los $25.000 pesos argentinos que llevaba y que le dieron 700 pesos bolivianos, que además le quedó plata argentina y que iba todo bien, que estaba muy contento", relató.

Ella se quedará con ese último momento porque lo que vino después fue solo dolor, desesperación, bronca e impotencia. "Las pertenencias la policía se las entregó a sus compañeros en ese momento, pero la motocicleta de mi esposo quedó en Bolivia. Será mi yerno quien se encargue de hacer ese trámite que será muy engorroso, pero tenemos que hacerlo".

Claudia como sus hijos, como su yerno Walter Estrada que habló con El Tribuno relatando el horror que la familia vivió a la altura del pueblo de Ivirgazama, a 200 km de Cochabamba cuando su suegro fue colisionado con un camión, cayó al costado de la ruta y murió dos horas y media más tarde por falta de atención médica, han recibido decenas de llamadas.

"Mi esposo murió por la falta de humanidad de esos monstruos que no quisieron atenderlo porque no querían recibir plata argentina. La policía entregó solamente $10 bolivianos cuando sabemos que tenía 700 bolivianos y más plata argentina. Por eso salgo a hablar, porque no quisiera que nadie más tenga que sufrir lo que nosotros estamos sufriendo. Mi esposo ya no está con nosotros, ya no volverá pero eso no puede seguir pasando, las cosas no pueden seguir siendo iguales, algo tiene que cambiar", manifestó.