El fiscal penal 2 de Tartagal, Rafael José Medina, investiga la denuncia de un vecino de esa ciudad, que comenzó a recibir mensajes amenazantes de Whatsapp en su teléfono de números desconocidos, incluso con fotografías vinculadas a su grupo familiar y una donde había un arma de fuego con proyectiles. Finalmente, a principios de octubre, personas desconocidas efectuaron un disparo frente a la casa de sus padres.

De las tareas investigativas desplegadas, se logró individualizar a un sospechoso de haber desplegado la actividad ilícita denunciada y se solicitó su detención.

El acusado, de 34 años, está representado por un defensor particular y fue imputado este viernes como autor del delito de coacción agravada (tres hechos).

Desde la Fiscalía se solicitó que se mantenga su detención, mientras se cumplen diversas medidas solicitadas.