Romero, de senador a periodista
Juan Carlos Romero debutó como periodista en la radio de su propiedad en un espacio que conduce personalmente y con el que busca afinidad con la audiencia y de paso tratar de conseguir algunos votos.
El senador debutó en la programación de la AM840 el lunes, cuando se sentó en el estudio de la radio de la familia para conducir “Romero te escucha”, una propuesta que no es innovadora para nada y que refleja la urgencia de votos que tiene.
El senador resolvió copiarle el modelo a Guillermo Durand Cornejo, el primer candidato a diputado nacional de su lista y que gracias a su presencia en los medios logró ampliar su caudal electoral hasta convertirse en el gran elector de capital dentro del romerismo.
Entonces, convencido de la influencia de la radio incluso por encima de su diario, Romero resolvió asignarse un espacio y durante dos horas atender llamados telefónicos de los oyentes dejando de lado sus fueros y prejuicios que corren a la par.
Romero se calzó los auriculares y respondió desde el micrófono a las llamadas telefónicas que en la primera salida al aire eran hechas por su propio equipo de prensa para permitir que el senador nacional expusiera sus proyectos menos conocidos buscando de esta forma llegar a la audiencia y de paso permitirle sentirse cómodo.
Por supuesto que el ciclo de "Romero te escucha" está lejos del de Durand Cornejo, donde el dueño del Partido Conservador Popular atiende verdaderos llamados de consumidores que luego pasan por CODELCO para recibir el aval respectivo en las presentaciones para reclamar por sus derechos. También está lejos del ciclo “Aló presidente” que condujo Hugo Chávez Frías en Venezuela.
Pero el ciclo radial refleja dos cosas. Por un lado la urgencia electoral en la que cabe esperar una agresiva campaña con afiches callejeros promocionando el programa como hacen otros políticos. También refleja cuál será la actividad que el propio Romero realizará en un futuro si es que su carrera política sigue en picada.
Entonces, tal vez si resulta positiva su incursión, prosiga ganando espacios en la radio de su mamá Vicenta Di Gangi y así los domingos conduzca un programa con éxitos del ayer y al mediodía uno de tangos. O tal vez incursione como comentarista en los programas del médico Walter Chian contando chistes verdes. O mejor aún aprovechando sus conocimientos de predicciones sobre el clima o tal vez se acople comentando partidos (de tenis o golf, por supuesto) en los segmentos deportivos de la radio.
Y no resultaría extraño pensar en que algún momento desembarque en el diario que también es de su propiedad, con una columna de cierre donde repase el santoral del día y dé información sobre el pique, eso sí, de truchas albinas porque eso de pescar yuscas es para otro tipo de gentecita.
Por: ATO
Fuente: Columna de opinión