Siniestro Av. Paraguay: Luego de ser operada, dan el alta a la última mujer hospitalizada
En la jornada de hoy, dieron de alta a la última mujer que quedó hospitalizada tras el siniestro en Av. Paraguay. El triste resultado fue un total de 10 personas atropelladas por un conductor en estado de ebriedad y aparentemente drogado. Inicialmente se conocieron 3 muertes y 4 pacientes dados de alta. Luego, dos mujeres murieron en el nosocomio, y hoy la última mujer regresó a su hogar tras ser operada.
"Fue una pesadilla lo que viví. Gracias a Dios estoy en casa con mis hijos, pero tengo un dolor profundo en el pecho. Fuimos a divertirnos y la pasamos bien, pero ella no regresó", dijo Inés refiriéndose a su amiga Karen Marín, quien murió hace algunos días.
En referencia de la muerte de su amiga dijo: "Me enteré por un mensaje que me llegó al celular de que Karen había muerto. Le pedí a la enfermera que me llevara, por favor, a la morgue para despedirme, pero me dijeron que debido a las condiciones en las que estaba no podía. Fue muy doloroso ver el entierro y despedirla por celular. Cuando me encuentre mejor, voy a ir a verla al cementerio", dijo la mujer a El Tribuno.
Recuerdo doloroso
La mujer aseguró que tras salir de uno de los boliches de Av. Paraguay cruzaron al frente y se encontraban en inmediaciones a la empresa Coca-Cola, se dio vuelta para buscar un remis y vio un auto blanco que se dirigía hacia ellas haciendo giros rápidamente. "Me quise dar vuelta para avisarle a mi hija que se corriera, y ya me desperté en el piso. El auto me chocó a mí y a ellas".
Al despertarse, se encontró en el suelo con una llovizna fuerte que caía en el lugar. Al intentar pararse, no pudo hacerlo porque tenía la pierna quebrada. "Empecé a gritar desesperada por mi hija, porque no la veía, por mi amiga, y giré la cabeza y vi muchos cuerpos tirados".
Médicos del nosocomio le comunicaron a la madre desesperada que su hija estaba bien y cerca de ella. Al poco tiempo llega su hermana quien logra identificar a Karen como una de las pacientes delicadas y comunicarle lo sucedido a su familia.
Su vida cambió
"Ahora no puedo hacer nada. Yo soy peluquera y vivo de esto. Si no trabajo, mis hijos no comen", dijo la mujer. "Es una pesadilla. Cierro los ojos y recuerdo todo. Ver los cuerpos tirados sin vida fue una pesadilla. Pero gracias a Dios mi hija está bien, y yo tengo que esperar en mi recuperación", añadió la mujer.
Recuerdo de su amiga
Inés recibió un mensaje esa noche de Karen, a quien no veía desde septiembre de 2023, cuando fue a recibir sus servicios de peluquería. "Amiga, estoy llegando a tu casa. Vamos a bailar, salgamos", le dijo la joven mientras llegaba a su domicilio.
"No nos veíamos hace mucho. Me queda el recuerdo de Karen, de su alegría. Me había contado que estaba trabajando y que ahora podía brindarle lo mejor a su hija. Nos dimos un abrazo tan sincero que no me di cuenta en ese momento de lo que significaría", finalizó.