Con vigilancia intensificada, comienza la época de los arbovirus, ¿de qué se trata?
Con el inicio de una nueva estación comienza a intensificarse la vigilancia sobre los arbovirus, especialmente dengue, zika y chikungunya.
La época primavera-verano trae lluvias y patologías que preocupan a todos, ahora no solo al norte del país, ya que el 80% del territorio nacional se vio afectado por la última pandemia del mosquito.
A la vigilancia del 2024 se suman otros virus, oropouche y mayaro, pertenecientes a los arbovirus transmitidos por artrópodos, los cuales tomaron relevancia por los casos que tuvieron lugar en Bolivia.
“Estamos en el periodo interepimédico porque los últimos casos de dengue autóctono fueron en junio y a la fecha no tuvimos circulación de virus” comentó desde la Dirección de Epidemiologia, Francisco García Campos, aclaró que los casos que se registraron en el último tiempo correspondían a fuentes fuera de la provincia.
Con vigilancia intensificada y preparando el nuevo plan de abordaje de los arbovirus, la vacunación constituye una herramienta fundamental para dar lucha al dengue, siendo Salta pionera en su implementación.
Ahora el plan de vacunación se ampliará al grupo de 15 y 19 años, además se iniciará la inoculación de la segunda dosis a quienes corresponda, siendo 25.000 personas las que recibieron una dosis en la primera campaña.
En cuanto a stock, el plan nacional programó una primera entrega de 6.000 dosis, las cuales deberían llegar a la provincia.
Otra infección a tener en cuenta es la salmonella, poniendo foco en el aumento de temperaturas y el cuidado en la manipulación de alimentos: “No tenemos un alerta hoy por salmonelosis, la alerta es para mantener ese número bajo de casos” dijo en Multivisión Federal.
Leishmaniasis
La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria que desde 2008 hasta la fecha suma 60 casos aproximadamente en la provincia y tiene dos tipos, por un lado, la mucocutánea y la visceral.
La visceral afecta principalmente a la población menor de 5 años sobre todo en condiciones de inmunodepresión, desnutrición y con grado de vulnerabilidad.
Se trata de una enfermedad con alta carga en la salud pública, puede ser mortal, los tratamientos son costosos y tiene un componente ambiental y vectorial importante, ya que la visceral puede presentarse en humanos y canes de vida familiar.
El mosquito que transmite la infección se llama comúnmente “plumita” o “torito” el cual es un flebótomo que se alimenta del perro afectado y termina infectando al humano.
Este ciclo se hace en unas pequeñas ecorregiones en la provincia, circunscriptas principalmente hacia el borde derecho de la ruta 34 en los departamentos San Martín y Rivadavia, comentaba García Campos, haciendo hincapié que San Martín es el departamento con mayores casos, por lo que se llevan adelante trabajos en conjunto con miembros de la sociedad.