Disparan a un policía en Orán, en lo que creen fue un ajuste de cuentas
El hecho ocurrió en Orán en un camino paralelo a la ruta 50. Una versión habla de un intento de robo. Otra hipótesis señala que se trató de un ajuste de cuentas por el secuestro de 10 kg de cocaína.
Policiales20/07/2016Ayer a las 6 de la mañana el oficial Álvaro G. S. fue interceptado en plena calzada, cuando se dirigía a prestar servicio a la base operativa del barrio Taranto de Orán. El uniformado iba a bordo de una motocicleta Honda Wave por el camino alternativo a la inconclusa autopista de la ruta 50.
A 4 kilómetros de Yrigoyen, a la altura de los cañaverales y por razones que se investigan -porque al parecer no hubo testigos-, un hombre salió del cañaveral hizo detener la moto violentamente y cuando el policía estuvo en el suelo le disparó. Sin embargo, el disparo alcanzó solo uno de los brazos del policía, que quedó tendido mientras el agresor huía nuevamente hacia los cañaverales.
El policía herido fue trasladado hacia el hospital San Vicente de Paul, donde se encuentra internado fuera de peligro. El caso fue tomado directamente por la Brigada de Investigaciones
El violento hecho de sangre contra un oficial motivó ayer una movilización de la fuerza policial en todo el departamento Orán, pero por sobre en los cañaverales de la ruta 50.
Una posible conexión con el hecho, según El Tribuno, sería el secuestró de un cargamento con poco más de diez kilos de cocaína de máxima pureza, el que fue abandonado por un bagayero "blanco" en un extraño procedimiento que se llevó a cabo en la noche en los cañaverales de la periferia de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán. El operativo fue realizado por investigadores de la Policía Provincial del sector 22 de Orán.
Aunque fue informado como un hecho fortuito, sorprendió el volumen, la forma y el lugar donde el supuesto traficante abandonó la valiosísima carga.
La zona, aseguró ayer a El Tribuno un conocido periodista del medio, posee abundantes cañaverales que son utilizados para guardar o esconder mercancías de contrabando. En el mismo lugar durante las noches cargan la mercadería a los autos que ya traspasaron los controles cercanos a la ciudad.
En ese sitio, en la noche del jueves pasado los policías hallaron a un sujeto sentado sobre una mochila, que al ver el móvil policial intentó adentrarse a los cañaverales, donde dejó caer la carga de la mochila: 10 kilos de cocaína. Luego, en la mañana de ayer los oranenses se desayunaron con una nueva noticia generada en la zona de los cañaverales, esta vez un policía que se salvó milagrosamente de ser ejecutado.