Día de los Jardines: Trabajar desde la diversidad, el desafío actual de las maestras

Rosario Vera Peñaloza nació el 25 de diciembre de 1873 en el pueblo de Atiles, La Rioja. Dedicó su vida a la enseñanza y fundó el primer jardín de infantes argentino. Luego de una admirable trayectoria, llegó a Inspectora de Enseñanza Secundaria, Normal y Especial. Falleció el 28 de mayo de 1950. Esa es la fecha que se toma, precisamente, para conmemorar en su honor, el "Día de la Maestra Jardinera" y el "Día de los Jardines de Infantes".

InformateSalta dialogó con maestras salteñas, quienes nos hablaron de su vocación, sus experiencias y los desafíos de la educación inicial actual. En ambos testimonios, las "seños" se refieren a la diversidad como uno de los factores fundamentales desde dónde partir para construir valores en los niños.

Tania Daniela Rodríguez se desempeña como maestra jardinera, además de dedicarse a la licenciatura, hace 6 años. “Hoy es un día de homenaje para los jardineritos. Las escuelas preparan diferentes actividades, algunas celebran toda la semana, hacen salidas al teatro, al cine. Los papás también se involucran. En el acto que vamos a realizar el lunes la actuación la van a hacer los papás, quienes van a homenajear a sus hijos”, manifestó la seño.

La capacitación constante en los docentes, como señaló Tania, es un aspecto muy importante a la hora de estar frente a un aula. “Yo trabajé en escuelas privadas y este año comencé a trabajar en escuelas públicas, capacitándome todo el tiempo porque hoy los chicos vienen demasiado estimulados y con mucha información de afuera, a veces a los docentes nos sorprenden y nos cuesta, por eso es necesaria la formación continua”.

La seño Taña indicó que uno de los objetivos del nivel inicial es atender a las diversidades, a las características particulares de cada niño, reconociendo el juego y la experimentación como algo primordial. El descubrimiento es fundamental para el aprendizaje para que a lo largo de la trayectoria escolar puedan desarrollar la autonomía y fortalecer el rol protagónico.

“Mi vocación surge en el transcurso de cursado de la carrera, en ella descubrí cuán importante es educar a los niños en sus primeros años. Me fui enamorando de esta profesión cuando tuve mi primera experiencia como docente a cargo en una salita, es indescriptible el amor, la ternura, la alegría que te expresan los jardineritos día tras día. Sin duda alguna ellos llenan de color mi vida y agradezco a Dios por esta vocación”, dijo Tania.

La maestra consideró que el desafío actual es atender a la diversidad y la inclusión. “Cada niño tiene un espectro de capacidades y de intereses diferentes. Poder abrir nuestra mentalidad, aceptar y trabajar con cada uno para poder desarrollar sus potencialidades. Todos los niños tienen diversas inteligencias”.

Valentina Ovejero Arauz, directora del jardín “Las Mariposas” expresó que más allá del festejo, “éste día tiene que ver con recordar la importancia de nuestra profesión y de la educación de la primera infancia”.

La seño Vale contó que en el jardín trabajan para poder repensar las estructuras de la educación actual. “Todavía nos falta mucho para romper con ciertas estructuras que piensan que los niños son todos iguales, que vienen todos con la misma información, con el mismo desarrollo. En este jardín apuntamos a que esa educación sea un poco más libre de estructuras”.

Adecuarse a la niñez de hoy es uno de los principales desafíos señalados por Valentina. “Reconstruir la estructura ideal de la educación y buscar otras formas que atiendan a las realidades actuales, con las familias y las identidades de género actuales”, sostuvo y destacó la necesidad de no reproducir ni generar en los niños estereotipos de “mujer” y de “hombre” para evitar que se construyan diferencias que puedan derivar en actitudes discriminatorias y violentas.