Habló el ciclista del video: “Espero llegar a un acuerdo y que cada uno se responsabilice de lo que hizo”
Tras darse a conocer las imágenes de lo ocurrido en avenida Bicentenario y Paseo Güemes, el ciclista reducido por la policía relató su versión de los hechos y pidió llegar a un acuerdo.
Policiales30/07/2020Continúan las versiones cruzadas entre los protagonistas del incidente en Paseo Güemes. Luego de que se dieran a conocer las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad, ambas partes hicieron sus descargos.
En este caso InformateSalta dialogó con Julián, el ciclista que violentó el auto de la mujer y que luego quedó reducido por la policía sobre el asfalto. Según su relato, él y su hermano venían circulando por la calle Belgrano, hasta que metros antes de la intersección con Vicente López se rompe el pedal de una de las bicicletas por lo que debieron auxiliarse y pedalear hombro a hombro.
“Veníamos por el lado izquierdo sobre la calle porque la ciclovía no está todavía habilitada sobre el Paseo Güemes. Un auto nos toca bocina, nos encierra un poco, frenamos y dejamos que se adelante. Se pone el semáforo en rojo, pasamos autos mientras estaban parados, nos dimos con un colectivo que no nos dejaba pasar, entonces pasamos por el costado”, explica, a lo que añade: “La persona nos vuelve a tocar bocina, a hacer señas a lo que nosotros le devolvemos las señas, riéndonos: fue de forma burlona como dice la mujer”, reconoce el ciclista.
Según lo que indica luego, sintió un golpe adrede por detrás: “Me di vuelta para revisar que la bici esté bien y cuando me dedico a irme a pesar de alguien me insulta y golpea adrede, se produce una segunda colisión, también adrede que me rompe la rueda trasera de la bici”.
Acción y reacción
A partir de esta instancia, comenzó el drama que retrataron las cámaras.
“Me enojé, no justifico la forma en la que reaccioné, pero ¿cuántas chances, cuántas veces tengo que dejar que me golpeen para reaccionar?”
“Me levanté enojado”, profundiza el joven y aclara: “Le dije a la persona que baje la ventanilla, a lo que veo que no baja la ventanilla y acelera el auto. Ahí temí que se iba a dar a la fuga y que iba a pasarle encima a mi bici”. Luego de esto, intervino la policía que se encontraba en el lugar y los llevaron detenidos a ambos ciclistas.
“La intención no fue romperla pero eso es imposible de demostrar”.
El accionar policial
El incidente que se produjo a horas 11 continuó a lo largo de la jornada ya que entre denuncias y contradenuncias, los ciclistas fueron demorados hasta las 18 hs aproximadamente. En sus descargos iniciaron dos denuncias: una contra la mujer y otra contra los policías que intervinieron. “Yo estaba de espalda pidiéndole explicaciones a la mujer y de golpe me empujan, a mi hermano le pegan de espalda” explica Julián.
“Nunca hubo preguntas, no fue protocolar el proceder de la policía; fue la clásica golpear, balear, matar y desaparecer. No solamente fue lo que se ve en el video: en el patrullero nos golpearon, nos tiraron el pelo, nos tiraron las orejas, todo para amedrentarnos”, aseguró.
Seguidamente inició la travesía de ir a Ciudad Judicial, a la Comisaría Primera, al médico legal: "Entiendo que hay denuncias en mi contra y yo labré una por hostigamiento vehicular y de recurrentes impactos adrede en la vía pública; y otra por el accionar de la policía.”
Reclamo por las bicisendas
Entre los dichos del ciclista es recurrente el reclamo por la falta de conciencia por parte de motorizados. “Es a diario que te tiren los autos, que te encierren, que te insulten”, dice, a lo que agrega: “La ciudad no está preparada para los ciclistas ni a nivel social ni a nivel infraestructura, porque las ciclovías son una vergüenza. No podés llamar ciclovía a eso”.
“Son veredas viejas que les pintaron franjas y pusieron unos ladrillos amarillos en espacios destinados para autos. Con esa ciclovía los políticos inauguran obras pero yo me siento desplazado porque me dan el rincón de calle que no se utiliza”
Para finalizar, el ciclista apela a que la justicia agilice las instancias para lograr un acuerdo con la mujer que conducía el vehículo: “Necesito la bici en condiciones de circular de nuevo y la señora seguramente quiere su auto con su vidrio entonces espero llegar a un acuerdo mutuo y que cada uno se responsabilice de lo que hizo”.
“Arreglarnos los vehículos, una mano, unas disculpas y chau”, concluyó el joven en el diálogo que mantuvo con nuestro medio.