A la hora de revestir una fachada de manera eficiente se pueden usar muchos materiales, aunque es cierto que en los últimos años se está optando por las fachadas ventiladas de composite por su eficiencia energética.
No obstante, la fachada ventilada no es la única opción, así que vamos a ver qué materiales podemos emplear para mejorar nuestra fachada.
Termopiedra
Cuando queremos hacer una fachada o rehabilitar una antigua, hay que buscar que el material empleado aísle del frío, del calor y de la humedad, pero también es importante la estética.
Esto es lo que nos ofrece la termopiedra, que es un tipo de panel de poliestireno de poco grosor que por fuera viene revestido de gres, mármol, granito o cualquier otro material similar.
Aísla muy bien y se monta rápido, por lo que es una buena opción para crear una fachada eficiente.
Porcelanato
La cerámica se usa mucho en baños y cocinas, donde se suelen colocar los célebres azulejos, un material cerámico que se limpia de una forma sencilla y que no requiere mantenimiento.
Esta cerámica se viene empleando desde hace años para revestir fachadas por las propiedades que hemos comentado y porque aísla muy bien de las temperaturas y del ruido. Además, se calcula que puede durar unos 50 años, toda una vida.
El ladrillo
El ladrillo tiene muy mala fama a la hora de crear fachadas, algo que se debe a que durante muchos años se ha estado usando materiales muy finos, de mala calidad y sin colocar aislante para mejorar la eficiencia.
Ahora mismo hay ladrillos de muchos tipos, grosores y propiedades, por lo que se pueden utilizar sin temor a que la casa quede mal aislada y a que no sea eficiente en el aspecto térmico.
Dependiendo de la zona en la que vivamos usaremos un tipo u otro de ladrillo, que es posible combinar con cámaras de aire si no hay problemas de espacio a la hora de construir.
El panel de composite
Entre todos los materiales que se usan para hacer fachadas, para revestirlas, ahora mismo el que está más de moda entre los constructores es el aluminio.
Con este metal se hacen las fachadas ventiladas de panel de composite, un revestimiento que se aprovecha de la sabiduría milenaria, de la construcción tradicional en la que se ha usado el efecto chimenea, sobre todo para eliminar el exceso de calor.
Gracias al aluminio se crean unos paneles que se fijan a las fachadas de tal forma que dejan un espacio de ventilación (de ahí el nombre de fachada ventilada) por el que circula el aire.
En las épocas frías, el aire se calienta y se queda dentro de ese conducto de ventilación, mientras que en el verano el aire caliente sube y sale por la parte superior, refrescando la fachada.
Esta ventilación también ayuda con la humedad, pues una de las medidas para acabar con ella es que haya algo de viento, lo que impide que se condense el agua y seca las zonas más húmedas.
Ahora mismo estas fachadas ventiladas con panel composite son las más eficientes energéticamente, motivo por el que se ponen tanto y se ven en tantos edificios, cuyos habitantes ahorran mucho dinero en energía.