Iruya: un fiscal investiga la muerte de la docente en un cerro

En medio del dolor por la muerte de Celeste de los Ríos, la profesora de Educación Física de 42 años que encontró la muerte mientras caminaba por los cerros de Iruya, se conoció que un fiscal investigará el deceso.

Al respecto, el senador por ese departamento, Walter Cruz, indicó a TN que la docente había salido desde la escuela del paraje Sala Esculla hasta la comunidad de Río Grande, camino que requiere de 8 horas de caminata, aparentemente con la intención de recibir la segunda dosis de la vacuna contra el COVID-19.

“La información dice que salió a vacunarse, pero está siendo motivo de investigación por parte de un fiscal que atiende el caso, porque el hospital maneja esto con los agentes sanitarios, ellos son los que llevan las vacunas cuando están disponibles hasta las escuelas. Estaba trasladándose en un camino complicado por el tema del clima”, dijo.

Asimismo, contó que Celeste trabajaba en la zona hace 4 años por lo que conocía el camino que estaba recorriendo. “Se está tratando de averiguar por qué salió en un horario en el que no es aconsejable salir, en un trayecto que es de 8 horas salir a las 2 de la tarde cuando en estos tiempos a las 7 de la tarde ya estamos de noche. Ha sido muy llamativo, está siendo motivo de investigación”, expresó.

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En este sentido, manifestó que en esta época del año y en la altura, que ronda los 5 mil metros, el viento es intenso, sobre todo por las tardes, a lo que se suma que las temperaturas llegan a los grados bajo 0.

“Ella tenía clases de lunes a jueves, por eso toma la determinación de salir el jueves. Era una profesora de educación física, que se sobrentiende en buen estado físico para caminar, conocía los caminos. La señal de celular y WiFi lo tiene la escuelita y una vez que se llega a Río Grande cuando las antenas no son dañadas por los vientos y la nieve. Ahí donde estaba ella es imposible”, indicó.

Finalmente, detalló que personas que la esperaban el viernes a las 8:30 horas se preocuparon porque no llegaba y se comunicaron con la escuela desde donde le informaron que había salido al día anterior. “Ahí se activó el sistema de alarma y nos dimos cuenta que algo malo había pasado”, concluyó.