Argentina tropezó en su debut en los Juegos Olímpicos y cayó 2 a 0 frente a Australia

Por Clarín.- Mucho antes que el resto de la delegación nacional e incluso antes de la ceremonia que inaugurará oficialmente los Juegos Olímpicos de Tokio, el seleccionado sub-23 de fútbol dio su primer paso en falso en el certamen: el conjunto dirigido por Fernando Batista no convenció y perdió 2 a 0 con Australia en el imponente Sapporo Dome en un encuentro correspondiente al grupo C.

La historia, que le permitía exhibir dos medallas de oro (en Atenas 2004 y Beijing 2008), y el prometedor plantel que había logrado conformar Batista (más allá de la negativa de ceder futbolistas de algunos clubes) invitaban a la ilusión en este debut en un torneo que a menudo ofrece sorpresas. En carne propia lo había experimentado un rato antes España, la principal candidata al título, que no había pasado del empate ante Egipto en el otro partido de la zona.

Y también lo experimentó Argentina ante un adversario prolijo y dinámico que no se acurrucó contra su arco, proyectó bien a sus laterales y sacó ventaja a partir de una de esas trepadas: Joel King sorprendió a Hernán De la Fuente, llegó al fondo por la izquierda y le cedió el grito a Lachlan Wales, que solo tuvo que empujar a la red en el segundo palo. Muy rápido la cuesta se tornó empinada.

La decisión de Batista de amalgamar a Fernando Valenzuela, Alexis MacAllister y Ezequiel Barco no dio demasiados réditos de entrada. Al equipo le costó mucho encontrar claridad y profundidad en el primer tiempo, más allá de alguna gambeta endiablada por la derecha del ex jugador de Barracas Central.

Así, el único camino para inquietar al arquero Thomas Glover en el primer tiempo fue el remate desde media distancia. Por esa vía estuvo a punto de empatar Barco con un derechazo venenoso que fue repelido por el travesaño. Muy poco para un equipo con aspiraciones, que además zozobró ante cada contragolpe de los oceánicos.

Para colmo, cuando el primer período se terminaba el árbitro serbio Srdjan Jovanovic, en un exceso de rigor después de 45 minutos de tolerancia, le mostró la segunda amarilla a Francisco Ortega por un forcejeo minúsculo en el área antes de la ejecución de un córner y dejó a Argentina con diez.

Para el complemento, Batista optó por no cubrir el hueco que había dejado la expulsión de Ortega, mantuvo una defensa de tres hombres y mandó al campo a Ezequiel Ponce por Valenzuela (había sufrido una molestia en la rodilla izquierda en el inicio del partido) para sumar un compañero para Adolfo Gaich en el área.

Tampoco así aparecieron las soluciones. Más allá de que monopolizó la pelota, Argentina, con MacAllister y Barco en deuda, tuvo serias dificultades para transformar esa tenencia en riesgo en un juego cada vez más áspero que el árbitro Jovanovic nunca logró encarrilar.

Una intervención providencial de Jeremías Ledesma ante un remate a bocajarro de Wales mantuvo a la Albiceleste en partido, pero la esperanza, sostenida más por el empuje que por el fútbol, terminó de extinguirse a los 35 minutos, cuando Marco Tilio, que había ingresado apenas unos segundos antes, marcó el segundo y dejó aun más en evidencia que Argentina deberá cambiar mucho si aspira a pelear por una medalla.

 Después de este decepcionante estreno olímpico, la Selección se medirá el domingo a las 4.30 con Egipto en Sapporo y cerrará su participación en el grupo C el miércoles a las 8 en Saitama ante España.

En otros partidos de la primera fecha, México goleó 4 a 1 a Francia, Nueva Zelanda derrotó 1 a 0 a Corea del Sur y Costa de Marfil batió 2 a 1 a Arabia Saudita.