La justicia determinó la prisión efectiva para un hombre por violencia de género

La fiscal de Violencia Familiar y Género 2, Luján Sodero Calvet, representó al Ministerio Público Fiscal en la audiencia de juicio abreviado ante el Tribunal de Juicio de Sala VII, del Distrito Judicial del Centro en la que un hombre de 48 años fue condenado por los delitos de violación de domicilio en tres hechos, desobediencia judicial, daños en dos hechos, resistencia a la autoridad, robo y amenazadas, todo en concurso real.

El acusado llega condenado por denuncias de violencia de género realizadas por su expareja, con quien tuvo una relación de ocho años y dos hijos. Se divorciaron debido a la violencia, por la que intervino el Juzgado de Violencia Familiar y de Género 2 que resolvió una serie de medidas cautelares como la exclusión del hogar.

A pesar de esto, el 28 de agosto de 2022, el acusado se presentó en el domicilio de su expareja, pidiendo a gritos que le abriera. Ante la negativa de ella, el acusado terminó por abrir la puerta golpeándola con un fierro.

Adentro de la casa intentó golpear a la mujer, la amenazó y escapó cuando se dio cuenta de la pronta llegada de oficiales de policía que fueron alertados a través del 911.

Por temor a su integridad y la de sus hijos, la víctima, quien tiene una discapacidad motriz, se retiró a la casa de su madre.

En otras dos ocasiones, el acusado volvió a la casa y en una de ellas rompió la puerta para entrar, amenazó a la mujer y se llevó algunos elementos. En la otra ocasión la amenazó delante de su exsuegra.

Meses después, el individuo se presentó nuevamente en la vivienda en estado de ebriedad, pateó la puerta de ingreso y fue el hijo de ambos, de 14 años, quien impidió su entrada. Al llegar la policía, el acusado adoptó una actitud belicosa, negándose a colaborar y revelándose contra la autoridad.

Después de recibir la confesión del acusado, el juez Federico Diez condenó al hombre de 48 años a 1 año y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo. Además, revocó una pena anterior, unificándola en una única condena.