El aumento en el precio del combustible comenzó a regir desde ayer 1ro de mayo, con un 4% de ajuste se configura como el quinto aumento que percibe en lo que va del año.
Desde InformateSalta nos comunicamos con Alejandro Martorell, empresario del sector, quien aclaró que la decisión de aumentar el 4% fue de las petroleras: “nos enteramos cuando está hecho el aumento”.
Si bien subió el precio, no es consecuencia del aumento en el impuesto a los combustibles, el cual fue postergado por el Gobierno nacional, sino que corresponde a la devaluación mensual del peso frente al dólar del 2% y el aumento del barril del petróleo.
La medida de postergación por parte de Nación fue aprobada por Martorell, quien dijo que el problema radica en que el combustible paga muchos impuestos.
“En realidad cuando vamos a cargar al surtidor, más que cargar combustible pagamos impuestos”.
Sobre el precio del combustible, explicó que no existe un desfase en comparación con los países limítrofes: “el combustible ya está en el precio que debería estar”, por lo que el quid de los problemas son los altos impuestos.
Los incrementos impactan sobre el consumo, el cual cayó entre un 8% y 10%, lo cual sumado al aumento en los costos de funcionamiento que incrementaron de manera desmedida afectan al sector.
Otro factor que incide en la baja de venta es la ubicación de la estación: “hay estaciones que la están pasando muy mal porque están abajo del punto de equilibrio”.
Consultado si el ajuste en el personal sería una opción, dijo que en su caso particular no está previsto bajo ningún punto de vista, recordando que, durante la pandemia, la crisis más importante que vivió la estación de servicio, no se despidieron trabajadores.