Con la llegada de una intensa ola de frío que afecta a gran parte del país, los profesionales de la salud alertan sobre los riesgos que enfrentan los adultos mayores y otros grupos vulnerables.
¿Sienten las personas mayores más frío que el resto?
Según los especialistas, la piel de las personas mayores es más delgada y sensible al frío, lo que las hace más propensas a problemas como la pérdida de calor corporal y la dificultad para percibir la temperatura.
Este fenómeno puede llevar a un aumento en la presión arterial y agravar dolores articulares por artritis, además de provocar contracciones musculares.
Para protegerse del frío, se recomienda a los adultos mayores seguir los siguientes consejos:
- Vestimenta adecuada: Usar varias capas de ropa para retener el calor, guantes para proteger las manos y gorros para evitar la pérdida de temperatura a través de la cabeza.
- Calefacción segura: Evitar el uso de braseros, ya que son altamente tóxicos. Cuando se utilice calefacción a gas, mantener una puerta abierta para asegurar la ventilación del ambiente, ya que la combustión consume oxígeno y puede provocar desmayos sin previo aviso.
Prevención de la hipotermia:
- Evitar la exposición prolongada al frío en exteriores.
- Generar calor mediante el movimiento (caminar, levantar las piernas, mover las extremidades).
- Mantener la casa calefaccionada de manera segura.
- Evitar cambios bruscos de temperatura que pueden causar enfermedades respiratorias.
- Mantener una adecuada hidratación y evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
- No automedicarse; en caso de problemas, consultar a un médico o acudir al centro de salud más cercano.
- No fumar en ambientes cerrados.
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