Sociedad26/12/2016

Por el calor, nuevamente los ríos de Vaqueros y La Caldera repletos

Para aliviar el calor insoportable de ayer, los salteños eligieron los ríos como Vaqueros y el Wierna, que estaban repletos. Hubo más de 2 kilómetros de filas de autos. Un tema de nunca acabar.

Para calmar un poco el calor y pasar la tarde de Navidad, ayer, las familias salteñas se volcaron de forma masiva a los ríos. Los tradicionales, el de Vaqueros y el Wierna, estaban repletos por lo que el embotellamiento de vehículos en la zona fue tremendo. Otros decidieron no entramparse con el tránsito y se refrescaron en los ríos San Lorenzo y el Arenales, a la altura de la Circunvalación Oeste.

Paola Montero le estaba dando una porción de bizcochuelo a su pequeña Victoria, de dos años, que acaba de salir del agua con bastante apetito, en el río de Vaqueros, cuando se acercó El Tribuno. "Vinimos después de almorzar con mis padres y hermanos. Muy linda el agua", contó la mujer que vive en barrio Unión.

Yamila Peloc, de barrio Tres Cerritos fue más preparada. Llevó un juego de mesa, sillas y sombrilla. "Trajimos de todo. Vine con mi tía, su marido y los chicos. La verdad que no da para ir a las piletas, una privada sale $70 la entrada", dijo. Vale recordar que ayer los natatorios municipales permanecieron cerrados en la ciudad.

Miriam Montañez vive en Buenos Aires, pero llegó hace unos días a Salta para ver a sus padres, en barrio 20 de Febrero. Al río fue con sus hijas y hermanas; al principio la idea era llegar hasta el Wierna pero debido a la congestión de vehículos desistieron.

Claudio Buloni, director de Prevención y Emergencias municipal, comentó que "hasta las 18 pasaron por el control ubicado antes del acceso a Vaqueros más de 500 vehículos, entre autos y motos. Hay más de 2,5 kilómetros de fila para ingresar a los ríos y a la carpa bailable que está en Vaqueros".

San Lorenzo también

En una recorrida, El Tribuno llegó hasta el río San Lorenzo, a la altura de la Circunvalación Oeste. "Estamos disfrutando del agua y aprovechando que el día está muy lindo y no llovió como se esperaba", dijo Emilce Giménez, de barrio Bancario, en compañía de su numerosa familia.

Marcela Wierna, de villa Soledad, también llegó hasta el lugar. "Estoy con mis sobrinas, hermana, y mis nietos, disfrutando en familia y tranquilos", señaló.

El río Arenales, a la altura de la Circunvalación Oeste también estaba colmado. Para Roberto, de Atocha, "el río está muy lindo y es una opción barata para compartir con la familia". Estaba con sus hijos, su esposa, cuñados y sobrinos.