Caso Peñalva: sin nada firme, la jueza avanza con las testimoniales
Tras desarrollarse la reconstrucción de la muerte de las jóvenes con la presencia de peritos del CIF y de parte, la jueza avanzará con las medidas restantes.
La reconstrucción de la muerte de Luján Peñalva, en un árbol ubicado en una finca de Cerrillos, colindante al canal de Río Ancho, frente al barrio San Carlos, no sirvió de mucho para el expediente, prácticamente no cambió nada, según dijeron fuentes del juzgado de Transición, donde se sigue la causa.
“La jueza está muy molesta, pero por ahora no va a decir nada”, deslizó una fuente judicial. Lo que generó cierto fastidio en la magistrada tuvo que ver con lo que sucedió durante y al término de la diligencia realizada el jueves pasado.
Las quejas de la querella y los familiares de Peñalva de no haberse atendido a ciertos pedidos de esa parte, como así también la filtración tergiversada de ciertos momentos de la medida, no cayeron bien en el juzgado, ya que tanto la jueza como la fiscalía mantienen una postura más cauta y ajustada a lo que permite el proceso penal mixto, sistema que deja en manos del juez de la causa la dirección de la investigación.
Peñalva fue hallada sin vida el 16 de julio del 2012. Su cuerpo colgaba de una soga, mientras que en el otro extremo, lo hacía el cuerpo de su amiga Yanina. Una rama de una morera, en tanto, era el punto medio y sostén de esta mecánica de muerte.
El caso fue investigado por los jueces penales, en ese entonces de Instrucción Formal, Pablo Farah y Pablo Arancibia, quienes determinaron finalmente que la causa de muerte fue suicidio, fallo que los padres de Peñalva nunca aceptaron, aun a pesar de otro fallo adverso dictado dos años después, el 7 de abril de 2014, por los jueces Abel Fleming y Adolfo Figueroa, de la Sala I del Tribunal de Impugnación.
Ante un resultado que no cumple con las expectativas de la familia, ellos decidieron continuar la investigación contratando un perito de parte, quien concluyó contrariando el informe oficial. Fue ese el recurso utilizado para pedir una vez más la apertura de la causa.
Expectativas incumplidas
La reconstrucción, rechazada en el proceso penal inicial por ser considerada improcedente, pues que se trata de una diligencia que debe ser realizada a partir de indicaciones de testigos que presenciaron el deceso, era el punto en el cual la querella apostó su mayor expectativa para revertir la hipótesis del suicidio.
Durante la reconstrucción participó como veedora de una perito, de origen centroamericano, quien se capacitó en un instituto de detectives en Miami, quien llegó a Salta.
La detective, Ninoska Martínez, acompañó al perito oficial de la querella, Carlos Párraga, como su asistente, aunque luego se puso al frente del equipo. Seis años después del deceso, la jueza cumplió con una de las diligencias que la familia quería.
Aunque la jueza, posteriormente, se mostró cauta y no bendijo a ninguna de las partes que llegaron al árbol donde murió Peñalva, fuentes del juzgado dijeron que los peritos de la querella no cubrieron las expectativas que pretendían.