Sociedad04/09/2014

Sigue el juicio de lesa humanidad donde declaró como víctima Susana Canela

“Estos delitos nunca prescriben y yo puedo asegurar que recién ahora estamos haciendo Justicia”, sentenció la Diputada Nacional salteña.

En una nueva jornada del juicio por delitos de lesa humanidad, en el Tribunal Oral Federal Nº1 de Córdoba, la diputada Nacional Susana Canela declaró como víctima y testigo.

La Legisladora relató que fue secuestrada el 24 de junio de 1976 en su casa por una patota de civil. Desde allí fue llevada a la comisaría de la ciudad de Villa Allende, en Córdoba, donde permaneció vendada mientras era golpeada en los interrogatorios referidos a su actividad política.

Recordó que su marido, Rolando Néstor Morales, ya había sido secuestrado, y que ambos fueron posteriormente llevados al Departamento de Informaciones (D2) de la Policía cordobesa, donde permanecieron durante tres días en el patio del lugar vendados y esposados.

“El cardenal Raúl Primatesta, había pedido (a los represores) que a las mujeres no las violaran, y que no era una orden el abusar de nosotras. A pesar de ello, un comisario vivía amenazando a mi marido con que si no me entregaba sexualmente a él, me iban a mandar a la patota en la que estaba Miguel Ángel Gómez (uno de los imputados), quien lo había golpeado brutalmente a mi marido hasta partirle las costillas. Todo el tiempo pasaban este tipo de cosas. En cuanto a los abusos, yo siempre traté de transmitirle a mis otras compañeras que se resistieran a estos hechos”, finalizó Canela.

De la declaración se desprende que el extinto jerarca de la Iglesia estaba al tanto de las prácticas represivas.

Fuente: Parte de prensa