Mientras Vaqueros y Cerrillos prohíben las carpas, en Salta hay dos habilitadas

Con la llegada de los primeros meses del año, y siguiendo tradiciones de antaño, durante años se instalaron carpas bailables en los municipios cercanos a la Capital, como antesala para los festejos de Carnaval.

Luego de numerosos sucesos que involucraron episodios de violencia e inseguridad, las carpas fueron puestas bajo la lupa por los vecinos, por lo que jefes comunales y Concejos Deliberantes, resolvieron finalmente no dar lugar a la instalación de las mismas, al menos en este 2019. 

Tras la ordenanza municipal de los primeros días de diciembre del año pasado, que prohibía la instalación de carpas en la ciudad de Cerrillos, desde la intendencia aseguraron que los controles son permanentes, aunque lamentaron la “pérdida de un ingreso importante”. 

Por su parte, desde Vaqueros, también indicaron que darán cumplimiento a la ordenanza que prohíbe su instalación, con el objetivo de garantizar seguridad y tranquilidad a los vecinos.

Otra es la situación en Salta capital, donde los organizadores que siempre son los mismos, son autorizados a instalar carpas en diferentes predios, que van cambiando año tras año. Tal es así que en el pasado funcionaron por ejemplo en la Rural, donde hubo innumerables quejas y reclamos, o en Ruta 26.

Este año, la Municipalidad de Salta habilitó 2 carpas en el ejido capitalino, en predios alejados de vecinos para evitar inconvenientes. Tal es así que una funciona en el Centro de Convenciones, y la otra en el Autódromo. Ambas hicieron su debut multitudinario el 1º de enero, sin registrarse inconvenientes.

En la Carpa Carnaval de las Estrellas, en el Centro de Convenciones, hubo mucha gente y desde temprano la gente hacía fila sobre Av. Paraguay para ingresar ya que de 16 Hs a 18 Hs la entrada era libre. 

Lo curioso es que en todos los casos, la promoción se centra tanto en los artistas como en la abundante bebida que se podrá encontrar al asistir a estos bailes. 

En La Pacha, ubicada en el Autódromo, calculan que fueron 10.000 personas las que asistieron a la primera fiesta realizada el 1º de enero.