Escándalo en Gendarmería, así fue la noche donde detectaron el robo de mercadería

Gendarmes prófugos e investigados. Sargento Ayudante Ramón González, Sargento Primero Roberto Vilte, Cabo Montero Nicolás, Cabo Pablo Méndez, Cabo Ezequiel Romero, Emanuel Barnes Aramayo, Cabo Sergio Esteban, Cabo Pamela Cima y Cabo Sergio Sebastián Esteban son quienes trabajaron el viernes a la noche en el Escuadrón 7 de Chachapoyas, donde una oficial descubrió a sus compañeros robando mercadería secuestrada en el depósito judicial.

Esa madrugada la oficial Ana Paula Carabajal se encontraba custodiando el depósito y mientras hacía su recorrido de rutina por las instalaciones, al llegar a la altura de la cancha de básquet, observó un vehículo tipo utilitario cruzando a gran velocidad por medio de la cancha, publicó La Gaceta Salta. Al acercarse al portón de madera, conocido como Puesto 1, el vehículo baja la velocidad y la oficial ordena a través de la radio que lo detengan.

En ese lugar estaba el cabo primero Emanuel Rodrigo Barnes Aramayo y, mientras Carabajal se acercaba observó que abrían el portón para que saliese del predio, sin revisarlo como lo había ordenado por radio.

Continuando su ronda, escuchó voces y  ruidos de chapas cercanos al portón del depósito judicial que tiene salida a la cancha de fútbol. Cuando se aproximó al lugar observó otro vehículo cuya parte delantera estaba al frente del depósito. Dentro del mismo había mercadería: acolchados “similares a las que se secuestran”, dijo la oficial.

Había cuatro personas, dos varones y dos mujeres, vestidos de civil. Cuando se acercó la oficial, les solicitó que se identifiquen y que no se moviesen del sitio. “Venimos de parte de González”, respondieron.

En ese momento Carabajal solicitó la ayuda del jefe de guardia, sargento ayudante Ramón Héctor González a quien le solicitó que vaya de manera urgente con linternas y esposas. Según la oficial, “se tomó un tiempo excesivo para acercarse al lugar”, en ese momento eran las dos de la madrugada.

El segundo Jefe de la Agrupación, Jorge Miño, fue quien solicitó que se inmovilicen inmediatamente a los ciudadanos que se encontraban ilegalmente dentro de las instalaciones de la guarnición, mientras informaba al jefe de agrupación y se disponían las primeras medidas.

Pasó tanto tiempo, que las personas detectadas dentro del cuartel se fugaron de forma “intempestiva”. Según relataron los oficiales, cuando llegó el Jefe de guardia adoptó una actitud “pasiva y de desidia” ante la novedad al no brindar ningún tipo de colaboración para la inmovilización de los intrusos. A las 3 de la madrugada se cambiaron los guardias de los puestos de ingreso. Luego, la fiscal auxiliar Paula Gallo Pulo inició actuaciones incautando los teléfonos de los supuestos involucrados.

Ramón González, jefe de guardia, se dio a la fuga cerca de las 4 de la mañana. Lo mismo sucedió con otros guardias que trabajaron esa noche. La justicia investiga la gravísima irregularidad, posibles complicidades y buscan a los responsables.