“Mirá lo que le hicieron, lo vamos a encontrar a ese hijo de p..” le dijo Cajal a una amiga de Jimena

Tras una nueva audiencia del juicio por el homicidio de Jimena Salas, donde paradójicamente no se juzga a los posibles causantes sino a Sergio Horacio Vargas, como partícipe secundario de homicidio triplemente calificado por ser cometido con alevosía y ensañamiento y por precio o promesa remuneratoria; y Nicolás Federico Cajal Gauffín, acusado por encubrimiento agravado, una amiga de la víctima describió lo que encontró al llegar a la escena del crimen. 

La mujer dijo que se conocían desde los 17 años y que estuvo presente el día que fue encontrada sin vida, un compañero de trabajo de Nicolás Cajal la contactó e incluso la llevó hasta la casa del barrio San Nicolás en Vaqueros. 

Dijo que ni bien vio al viudo ese día, cerca de las 14:15, este le dijo: “Mirá lo que le hicieron. Lo vamos a encontrar a ese hijo de puta”. Desde ese momento comenzó un recorrido como testigo dentro de la vivienda, que la hizo romper en llanto.

Durante el procedimiento policial, dijo que había sangre por todos lados. “Se veían manchas camino al baño y en los dormitorios. Había huellas en las paredes, en la puerta del baño...”, describió.

Cuando le preguntaron acerca de cómo era la relación de Jimena con su marido aseguró que no sabía que tuvieran problemas. Dijo que en la vida de su amiga no había “situaciones raras” y que se dedicaba primordialmente a su casa y a sus hijas, que eran su pasión. Contó que Jimena era hija única y que iba a un taller literario los jueves. Ella la pasaba a buscar esos días y la llevaba hasta Vaqueros.

Recordó que Salas le comentó que, la semana del hecho, habían tenido problemas con la alarma, que se había disparado obligándolos a regresar anticipadamente a su casa.

Aseguró que nunca supo que a Jimena le hubiera faltado nada económica ni afectivamente. Solo le comentó alguna vez que se sentía sola porque Nicolás pasaba mucho tiempo en el trabajo.

Finalmente señaló que la víctima estuvo casada anteriormente con otro hombre, pero nunca le comentó que él la hubiera molestado tras su ruptura.