Jimena Salas: Chats revelan que la novia del Chino Saavedra identificó a su perra tras el crimen
Justicia24/07/2023Los chats entre Javier Chino Saavedra y su novia al momento de cometido el asesinato de Jimena Salas, lo comprometen. Según publicó El Tribuno, la mujer reconoció a su perra en las fotos que difundió el Ministerio Público Fiscal, la misma que tomó la víctima minutos antes de ser ataca con armas blancas hasta la muerte.
Javier intercambió mensajes con quien entonces era su novia -apodada por él "Chichi"- sobre la "similitud" de la perrita, que ella tenía con la del caso. En 2017 se empezaron a difundir las imágenes que Salas y una vecina tomaron de un hombre con una caniche toy en sus manos, en Vaqueros, en el barrio donde vivía la víctima.
El Tribuno accedió a esos mensajes que datan del 6 y 7 de diciembre de 2017. Estos constan en la causa que -como vale recordar- la semana que pasó se solicitó la elevación a juicio no solo de Javier Saavedra, sino también de sus hermanos Carlos Damián y Adrián Guillermo Saavedra.
Fuentes que pidieron preservar su identidad compartieron con El Tribuno esa recopilación de conversaciones de WhatsApp, extraída de la cuenta de "Chino" Saavedra, quien fue detenido en una misión del Chaco salteño.
En varios tramos de la conversación la novia hace hincapié en que la perrita de la foto que se difundía por el caso de Jimena Salas tenía el mismo corte de pelo que le había hecho en ese entonces. Jimena Salas fue asesinada a puñaladas el 27 de enero de 2017 en el barrio San Nicolás de la localidad de Vaqueros. Incluso señala que la correa "era igual". La perrita de la novia se llama Bonis, pero también le dicen "Chichita".
"La van a llevar presa a mi Chichita", dice la mujer. "No dejo de pensar en las fotos", remarca. "Hay una (foto) que tranquilamente podrías ser vos quien la alza", le dice ella a Javier.
Saavedra ante la insistencia de la novia sobre el parecido se hizo el ofendido. "Que me digas que no (SIC) dudas de mí es como si existiese una posibilidad, te juro que es horrible", le responde. En otro momento le manifiesta: "Cuando abandones tus aires paranoicos y dejes de expresar cosas tan horribles"... "Acabas de matar una parte de mi", le dice Javier antes las dudas de Chichi, su novia. Se resguarda su nombre para no entorpecer la causa.
Pero en algunos momentos expone información llamativa. "Yo estuve viendo mi Google fotos, el día anterior, creo que salimos, y de ese día tengo videos de la Chichita en la plaza". "El día anterior Chi, el día anterior insiste", como teniendo muy claro cuando fue el crimen.
El 7 de julio ambos conversan sobre una nota publicada por El Tribuno titulada "Difunden las últimas imágenes que tomó Jimena Salas y los identikit de los sospechosos". Chichi le cuenta que leyó el artículo. "Pobre mina, seguramente conocían que le gustaban los animales", escribió Javier. "Vos decís que es la Bonis?", insiste ella. "No dejo de pensar en las fotos", agrega.
Al analizar estas conversaciones, los investigadores entienden que quien fue pareja de Javier Saavedra, desde el primer momento en que se publicaron las imágenes por el Ministerio Público Fiscal y los medios de comunicación, sintió fuertes sospechas hacia Saavedra con respecto al hecho investigado.
Según se publicó en el requerimiento de elevación a juicio de la causa, la hipótesis de los fiscales se sostiene en que los acusados habrían utilizado a la mascota (sería de la pareja de Javier Saavedra), para sensibilizar a la víctima, dejándola en estado de vulnerabilidad, lo que fue aprovechado para ingresar al inmueble con fines de sustracción de elementos de valor, situación que derivó en el violento ataque a la mujer con más de un arma blanca, ofreciendo ella resistencia, provocándole múltiples lesiones que derivaron en su muerte.
También se determinó que, días previos al hecho investigado, y desplegando el mismo modus operandi del uso de la mascota, abordaron a otras mujeres en Vaqueros y que por distintas circunstancias no lograron concretar ningún ilícito. En relación a esta situación, se pudo conocer que uno de los imputados brindaba a las mujeres con las que entabló contacto un Nº de celular donde intercambiaba 2 dígitos del número de la línea telefónica que tenía a su nombre, según la empresa prestataria.