Una imagen que venía siendo noticia y que se repitió en las últimas horas fue la de padres y familiares haciendo largas filas afuera de un establecimiento educativo de la ciudad de Salta, a fin de tratar de conseguir un asiento para el próximo ciclo lectivo 2024, algunos esperando desde el domingo inclusive.
Esto pasó en el colegio Sargento Cabral, ubicado en Villa Mitre, zona este de la capital provincial donde padres con camperas, frazadas, sábanas, reposeras y canastas portadas con termos, botellas y algún que otro refrigerio, pasaron las horas, noches y días tratando de conseguir un cupo disponible en la institución.
“Estoy desde anoche, vengo por mi hija”, comentaba un hombre oriundo de Jujuy quien en su reposera aguardaba a ser llamado mientras dialogaba con el móvil de Multivisión Federal. Sin embargo la directora del colegio, Estela Chaque, comentó que según le reportaron desde la Policía, desde el domingo al mediodía comenzó la fila.
“Esto es todos los años”, comentó la mujer rememorando que en la época de la pandemia decidieron hacer la inscripción de manera virtual y por sorteo, pero tuvieron una mala experiencia porque muchos padres se anotaron pero, al momento de la confirmación, solo se registró la mitad. “Entonces, para asegurar el banco, lo hacemos por orden de llegada”, explicó.
Sobre los cupos, mencionó que hay dieciséis 1° años divididos en tres turnos, siendo el de la mañana el más ansiado. “Son cuatro 1° con 28 asientos en cada curso; la semana pasada hicimos la primera preinscripción para hermanos y nos quedaron 65 vacantes por orden de llegada”, recalcó la docente. También indicó que hay un aporte voluntario que el año pasado fue de $5000, que abarca cuaderno de comunicaciones, seguro escolar, ficha de biblioteca e insumos de limpieza.
“El colegio tiene 3 turnos, mañana, tarde y vespertino, todos con varias orientaciones”
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