



Efectivos de la Subcomisaría Lola Mora acudieron rápidamente a una vivienda tras un llamado de emergencia al 911, donde se encontró un bebé de un año con signos vitales débiles.
La llamada de los padres alertó a las autoridades, y en cuestión de minutos, los oficiales llegaron al lugar y comenzaron a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) para estabilizar al pequeño.
Afortunadamente, la intervención policial fue clave en la pronta asistencia al bebé, ya que, minutos después, el SAMEC también se hizo presente para brindar apoyo adicional.
La rápida respuesta de los efectivos y la coordinación con el servicio de emergencias fueron fundamentales en este proceso de atención, luego, la criatura fue trasladada al Hospital Materno Infantil.
El comisario Cristian Aguilera, de la central de policía, destacó el compromiso y la capacitación continua del personal policial en situaciones de emergencia, como lo demuestra la realización de cursos anuales en primeros auxilios y RCP. “Este tipo de situaciones se dan en capacitaciones anualmente, estamos preparados para cualquier eventualidad”, manifestó Aguilera.
Aunque aún se desconocen los detalles exactos sobre la causa de la descompensación del bebé, el hecho resalta el esfuerzo y la dedicación de los policías en momentos de emergencia, mostrando un alto nivel de compromiso con la comunidad.






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