



A pesar del movimiento turístico que generan los tours de compras durante el receso invernal, los comerciantes de Salvador Mazza atraviesan un momento difícil. La diferencia de precios con Bolivia hace que los visitantes crucen la frontera sin detenerse a consumir del lado argentino, lo que perjudica directamente a la economía local.
Manuel Pieve, presidente de la Cámara de Empresarios Exportadores e Importadores de Salvador Mazza, expresó que “el comercio está mal, no tenemos ganancias ni ventas”. Según detalló, mientras en Argentina un plato de comida puede costar hasta 6 mil pesos, en Yacuiba se consigue por menos de 2 mil. “Eso hace imposible que funcionen los comedores o los taxis”, lamentó.
La situación también se ve afectada por la falta de combustible en el país vecino: “Tenemos ventas de trigo hechas a Bolivia, pero no las podemos entregar porque no hay combustible para los camiones”, contó Pieve. Hay 11 vehículos que se encuentran detenidos esperando cargar en estaciones de servicio.
Si bien reconocen que los trabajadores que cruzan a comprar logran estirar su salario, el impacto en los comercios locales es cada vez más crítico. Frente a este panorama, esperan que el Plan Güemes, recientemente lanzado por Nación, no complique más la actividad y se centre en el combate al narcotráfico.








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