



En la previa de Nochebuena, el centro de la ciudad de Salta volvió a mostrar una postal clásica de fin de año: compras de último momento y largas filas en comercios clave para la mesa navideña. El móvil de Somos Salta recorrió la zona y recogió testimonios que reflejan la ansiedad y el movimiento típico de estas horas.
En la intersección de San Martín e Ituzaingó, panaderías, fiambrerías y el Frigorífico Bermejo concentraron una importante cantidad de clientes. Las filas, en algunos casos, daban la vuelta a la cuadra, con vecinos que aguardaban pacientemente para completar las compras.
Un hombre que hacía fila desde hacía más de una hora contó: “Hace una hora que estoy esperando, va avanzando. Vine de Tartagal a pasar la Navidad con mi hijo y no me esperaba encontrarme con tanta gente”, dijo entre risas.
Otro cliente explicó que, para organizarse mejor, optó por comprar menos cantidad: “Yo compro la mitad del pan, mi hija se encarga de hacer los sándwiches de miga”, comentó, mientras avanzaba lentamente en la fila.
También hubo quienes ajustaron las compras según el presupuesto y la cantidad de invitados. “Quiero el pan entero. Suelo comprar dos, pero creo que esta vez voy a llevar uno. Somos 20”, relató una mujer, reflejando las decisiones de último momento que se repiten en muchos hogares.
Así, entre bolsas, charlas y espera, el centro salteño volvió a vivir el ritual de las compras navideñas, con vecinos que priorizan reunirse en familia y completar lo indispensable para compartir la mesa en Nochebuena.





























