Desde la desferalización, la justicia local condenó a 274 personas por microtráfico

La persecución penal de esta categoría de delitos del narcotráfico a manos de la justicia provincial data desde el primero de enero de 2014, año en el que la tarea de los fiscales, jueces y la policía de la provincia fue calificada de exitosa.

Prueba de ello fueron las 145 condenas que dictaron las distintas salas de juicio a lo largo del año pasado, debates en los cuales fueron condenados 196 personas por delitos de microtráfico, entre ellos tenencia y comercialización de drogas.

Este año, en tanto, el número de condenas ascendió ya a 200, con un total de 274 condenados, cifra que no sólo refleja un récord sino también la efectividad de este modelo de persecución penal de los delitos de narcotráfico, sobre todo en lo que se denomina venta de estupefaciente al menudeo.

En 2015, en un lapso de tres meses y medio, se sumaron 55 condenas, lo que representa un número de 78 personas condenadas por esta clase de delitos. En tanto, otros 37 juicios esperan su turno para ser tramitados en los próximos días.

Asimismo, en lo que va del año, las fiscalías penales ya elevaron a juicio un número de 123 causas, todas por los delitos de tenencia y comercialización de drogas, por lo que todo indica que 2015 superará ampliamente los logros obtenidos en materia de lucha contra el narcotráfico.

En materia de microtráfico, solamente en lo que va de este año, las cárceles y alcaidía judicial tiene un total de 140 personas privadas de su libertad, lo cual hace un promedio de 35 detenidos en un mes, o sea más de un detenido por día.

Acierto de la Provincia

La persecución penal de estos delitos por parte de la justicia provincia se debe a una decisión política del Poder Ejecutivo, cuyo titular, el gobernador, Juan Manuel Urtubey, remitió a la Legislatura un proyecto de Ley a fin de aplicar lo que se conoce como desferalización de drogas.

Este modelo, fuertemente impulsado por el gobierno y el Ministerio Público, obtuvo la aprobación de ambas cámaras legislativas, y desde el 1 de enero de 2014, la justicia provincial, de la mano de las fiscalías penales, comenzó a perseguir los delitos de microtráfico.

De esta manera, Salta se sumó a la provincia de Córdoba y Buenos Aires, quienes también aplicaron la desferalización de drogas, aunque no llegaron a obtener los resultados exitosos que se cosecharon en nuestra provincia.

El CIF, pieza clave

A ello se debe sumar una excelente tarea combinada entre las fiscalías y la policía local, como así también el aporte fundamental del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, cuyos laboratorios llevan adelante las pericias de campo en las causas penales por delitos de tenencia y comercialización de drogas.

Al respecto, cabe señalar que hasta el 17 de abril pasado, el CIF realizó un total de 186 pericias, mientras que otras 143 se encuentran en trámite. La intervención forense del CIF es considerada clave, pues cuando estos delitos se hallaban bajo la órbita federal, los estudios tenían una larga demora y causaban que las causas se paralicen o bien, en peor de los casos, los jueces se vean obligados a disponer la libertad provisoria de los acusados, con lo cual la cadena judicial que debía derivar en el juicio, quedaba truncada.

Juicios frecuentes

La agilidad de las fiscalías penales se vio compensada en los últimos meses con la tarea de las salas de juicios, cuya mayoría lleva adelante un número frecuente de juicios por delitos de microtráfico, con lo cual el proceso judicial se ve completado.

Al respecto, cabe mencionar como otro acierto la decisión de la Unidad Coordinadora de Lucha contra el Narcotráfico de la Provincia, de impulsar la creación de la Oficina de Gestión de Audiencia, recurso que llegó para motorizar los juicios, en especial los vinculados con casos de drogas.

En desafío que resta enfrentar, en tanto, gira en torno a la necesidad de arbitrar los medios para que la provincia cuente con cárceles suficientes a fin de poder contener a la cantidad de personas condenadas por esta clase de delitos, hecho que, si bien aún no es un problema, puede llegar a serlo en cuestión de tiempo, sobre todo si se mantiene este ritmo en la justicia penal.
 

Fuente: Nuevo Diario de Salta