Un vecino, un testigo y una psicóloga declararon en el juicio por el caso Bernasar, ¿qué dijeron?
Se lleva adelante el juicio por el crimen de Gimena Bernasar, cuyo cuerpo fue hallado el 22 de junio de 2019 en una habitación de su domicilio en barrio Lugones, estando en el banquillo José Humberto Nieva acusado como autor material del delito de homicidio doblemente calificado, Pablo Maximiliano Nieva como partícipe necesario y contra Ruth Alejandra Loaiza con el mismo cargo.
Tras la primera jornada donde habló la madre de la víctima quien pidió la condena máxima, este martes continuó el juicio donde declararon amigos de la víctima y una psicóloga, entre otros testigos, según indica prensa del Poder Judicial de Salta.
En primer término un vecino del inquilinato donde vivía la víctima con su pareja, es decir Nieva. Sobre éste último comentó que compartía algunos momentos con él, tenía conocimiento de que el acusado consumía estupefacientes, desconocía si Gimena también lo hacía pero la recordó como una chica carismática, divertida y que siempre estaba riéndose.
Luego declaró el joven que llevó a Gimena hasta el inquilinato aquel 22 de junio por la mañana, luego de compartir la noche con ella y otros amigos. También dijo que él la llevó hasta el inquilinato en barrio Leopoldo Lugones, viajando con una amiga. A esto agregó que al llegar se quedaron un rato estacionados enfrente, porque en la puerta estaba la pareja de Gimena en una moto con otro sujeto. Ella le explicó que prefería esperar a que él se marchara pero cuando éste se fue en la moto, Gimena le pidió que lo siguiera porque tenía que pedirle la llave.
Tras alcanzarlo, Gimena y su amiga se bajaron del auto, le pidieron la llave y volvieron a subir. El testigo aseguró que no notó nada extraño en ese breve contacto entre el imputado y la joven, y la llevó otra vez hasta el domicilio. Si bien esperó a que la joven regresara, al cabo de veinte minutos su acompañante bajó a golpear la puerta y, como Gimena no atendía, decidieron irse.
A su turno, la psicóloga del Poder Judicial que le realizó entrevistas a Nieva dijo que se trataba de una persona con poca tolerancia a la frustración y poco control de sus impulsos, como así que notó contradicciones en su discurso, pero no percibió rasgos de mendacidad.
Durante las entrevistas, el acusado le contó que la noche previa a la muerte de Gimena ambos habían discutido y que él había dado por terminada la relación. Sostuvo que el día de su muerte, ella había llegado temprano en un auto con tres hombres y dos mujeres, minutos antes de que él saliera a trabajar. Después, cuando volvió, la encontró sin vida, ahorcada, y le pidió ayuda a un tío suyo que vivía a la vuelta del inquilinato. El imputado también le contó a la perito que ambos consumían sustancias estupefacientes, pero aclaró que él solo lo hacía los fines de semana. Afirmó que Gimena también consumía durante la semana y que, en esos momentos, se ponía agresiva. Manifestó además que ella salía mucho con sus amigos.