El "mapa" de la nocturnidad: Zonas bolicheras superan ampliamente la cantidad de inspectores
Tema que volvió a la mesa de debate es la peligrosidad que acontece en las calles de Salta, problemática potenciada por la inconciencia de aquellos que conducen alcoholizados al volante, causando perjuicios innumerables y daños irreparables en los peores casos.
En las últimas horas InformateSalta se hizo eco de este panorama, haciendo un recuento de los últimos episodios protagonizados por estos irracionales que manejan aún tras beber, pero también de una arista no menor: la falta de controles a la salida de los boliches, donde esta peligrosidad es más latente, donde la problemática es más factible para su materialización, donde la seguridad es en muchos casos un anhelo.
En ese contexto, el secretario de Movilidad Ciudadana de la Municipalidad, Gilberto Pereyra, confirmó que la madrugada del domingo no había controles municipales en la zona. “No tenemos controles permanentes con el personal (…), no podemos conformar un grupo durante la noche”, dijo el funcionario argumento que esto se debe a que muchos inspectores están de licencia, por tanto hay una única patrulla de solo seis integrantes.
Más allá de la carencia de recurso humano en el área, la cifra dada por el funcionario enciende las alarmas, pues los mismos son más que insuficientes si uno tiene en cuenta la cantidad de boliches y sitios nocturnos donde, al final de la actividad, el descontrol, la embriaguez y el libertinaje se mezclan en un caldo peligroso y hasta mortal para la sociedad.
Basta un breve vistazo al mapa de la Capital para darse cuenta de tal cuestión con los boliches y sitios nocturnos que funcionan a la luz de la luna. Solamente en zona sur operan cuatro boliches, como ser La Roka y La Rosa en la avenida Paraguay, Metrópoli en la avenida Ex Combatientes y, camino al aeropuerto, Juan de los Palotes, este reciente en el rubro.
Por la zona del ingreso a Salta por el este, en el acceso del Portezuelo figura el Mao-Mao y, más para abajo, están Salón Vip y Pecas en cercanías de la Terminal. Yendo para el norte por avenida Bolivia, se puede tener en cuenta Hakuna, sitio igualmente elegido por la juventud.
A estos hay que sumar los corredores nocturnos de La Balcarce, el Paseo de los Poetas, el paseo Güemes y la zona de la avenida Reyes Católicos en Tres Cerritos. Esta acotada pero precisa lista de sitios nocturnos y donde el alcohol es compañía permanente ya sintetizan la gravedad a la que se expone Salta, sin controles y sin personal para controlar, o mejor dicho, evitar fatalidades.