Benjamín Cruz: "Los chats son reales"
Luego que se conocieran mensajes que el extinto Darío Monges habría cruzado con Benjamín Cruz, donde se discute un "saldito" pendiente, el ex secretario de Seguridad, en una entrevista con Daniel Murillo, aseguró que los chats que encontraron en la nube "son reales", aunque dijo que "muchos de ellos están descontextualizados".
En la oportunidad, aclaró que algunos buscan sacar ventajas y desinformar a las personas, y que va a querellar a todos los que difamaron su buen nombre y su familia. “Yo siempre me ajusté a derecho, he colaborado con la justicia, antes que a mí me citen como testigo en la fiscalía penal, yo me presenté ante la fiscalía penal de turno en la cual puse a disposición mi teléfono celular", indicó.
"Los chats son reales pero están descontextualizados"
Respecto a lo del "saldito" que le reclamaba a Darío Monges, explicó que "está descontextualizado. "Yo colaboré muchísimo en Navidad, Reyes, Día del Padre, Día de la madre, y ese chat era 5 de enero de 2022 y se habían organizado festivales con colaboraciones y donaciones de Navidad y Reyes, se les dio gaseosas, juguetes y en ese contexto yo le pongo más y reclamaba esa parte".
En ese mismo, sentido aclaró que "el saldito" "nada tiene que ver con el narcotráfico ni actividad ilícita alguna". "No existe ni un indicio mínimo que avale tal hipótesis", manifestó.
"En el chat que tiene la justicia no hay ningún monto. Ni tampoco eso está relacionado con el narcotráfico, ni con la liberación de rutas", dijo.
También, manifestó que "no tenía Darío Monjes ninguna relación de dependencia con él". "No trabajaba para mí", aseguró.
Por otro lado, desmintió las acusaciones en su contra sobre una supuesta autorización para que Darío Monge visitara al detenido Cabezón Díaz. "Yo no autoricé ni dije ni obligué a nada de lo que se me imputa", declaró Cruz, quien también subrayó que las decisiones sobre las visitas y el ingreso de personas al penal correspondían a otros funcionarios dentro de la jerarquía del sistema penitenciario.
Según explicó, en ese momento, el subsecretario de Servicios Penitenciarios, Ángel Sarmiento, era quien debía evaluar y decidir sobre tales solicitudes, no él.
El exfuncionario también detalló que la única interacción con Monge estuvo relacionada con un tema de seguridad, ya que Monges había solicitado una reunión para hablar sobre el Festival de los Fogones y la situación de un detenido que supuestamente estaba en condiciones precarias dentro de la cárcel.
Según Cruz, Monges nunca actuó como abogado, sino como un intermediario preocupado por la situación de este recluso, y la visita fue autorizada tras una consulta interna.
Finalmente, reiteró que su única función era velar por la seguridad ciudadana y que no tenía injerencia en las decisiones operativas dentro de las unidades penitenciarias.