Cientos de salteños padecieron la tortura de cruzar Vaqueros

Demoras de 3 y 4 horas se vivieron ayer por la tarde - noche para ingresar a la ciudad por la Ruta 9, es decir, todos aquellos vehículos que volvían de los campings o ríos de La Caldera o Vaqueros.

Como ocurre todos los veranos, desde hace muchos años, los salteños eligen el río Vaqueros o el Wierna para refrescarse, fundamentalmente por su cercanía. Ayer, eras cientos de familias las que disfrutaban de un domingo espectacular en las aguas de estos dos ríos, o incluso un poco más allá, en el dique Campo Alegre.

Pero la tortura comenzó alrededor de las 19 horas, cuando todos emprendían el retorno. Kilómetros de cola de vehículos avanzando a paso de hormiga, se extendían por el camino de cornisa. Era tal el fastidio de algunos que directamente optaron por parar al costado de la ruta 9 y esperar que se descongestione un poco.

La policía municipal de Vaqueros no colabora en nada. La Vial entorpece más de lo que ayuda. Ni que decir que un puente estrecho, con una mano de circulación en cada sentido es obsoleto a esta altura. Pero no es obsoleto de ahora, hace años ocurre lo mismo, y a nadie se le ocurre una solución.

¿Qué pasaría si un vecino que vive en esas zonas tiene una urgencia de salud? ¿O si es necesario el paso de una ambulancia? Es imposible. No puede haber un sólo paso. 

Un nuevo puente debiera haberse construido hace tiempo ya, o al menos, buscar una nueva vía de conexión por la otra margen del río. 

No obstante, nadie habla del tema, no hay planes, a nadie le importa, hasta que ocurra una desgracia, pero como siempre, será tarde.