Se conocieron detalles escalofriantes de la confesión de Nahir
Para probar su culpabilidad, la joven le mostró al fiscal cómo se carga el arma utilizada para matar a su ex novio. Y contó que después caminó hasta su casa y se fue a acostar.
Policiales13/01/2018Clarin/ Sentada frente al fiscal y acompañada por su abogado, Nahir Galarza intentó probar que su confesión tenía sustento; que no se estaba autoincriminando con intensión de cubrir a alguien. Para demostrar que había sido ella quien disparó y mató a su ex novio Fernando Pastorizzo, simuló tener en la mano el arma de su papá, utilizada para balear al joven de 20 años, y mostró cómo se hace para cargarla y disparar.
La transcripción de la declaración de la chica de 19 años, difundida por el diario El Dia de Gualeguaychú, lo describe así: "En este acto muestra cómo se arma un arma de fuego y explica que se saca primero el seguro y luego se agarra arriba, se tira para atrás y se suelta y con esto está lista el arma".
Fue el cierre para un testimonio que derivó en su inmediata detención, cerca de la medianoche del 29 de diciembre. Horas antes, pasadas las cinco de la mañana de ese mismo viernes, Fernando había sido hallado por un remisero: estaba tirado en la calle y agonizaba al lado de su moto, luego de recibir dos disparos. Minutos después falleció.
"Al hecho lo cometí yo sola. Cuando salimos de la casa, la que le disparó fui yo. Lo hice con el arma de mi papá, que estaba arriba de la heladera, donde la pone siempre", aseguró Nahir en su confesión al fiscal Sergio Rondoni Caffa. Y agregó: "Los dos disparos los hice con esa arma. Di una vuelta a la manzana y volví caminando a mi casa. Dejé el arma en su lugar sin que mi padre se diera cuenta y me fui a acostar”.
En ese acto ya asomó la estrategia de la Defensa: negar que su clienta y Fernando estuvieran de novios. En su confesión, Nahir entregó un sobre rojo que llevaba su nombre y en el interior tenía una carta supuestamente escrita por Fernando. Allí, el joven daba por terminada la relación entre ambos. Así buscaron sostener otro punto de la declaración de Nahir: "Estuvimos un par de años juntos, pero nos peleamos, nos dejábamos unos días, y así, cada uno hacía lo suyo y habíamos quedado que no nos íbamos a ver y hablar más”. Sin embargo, el escrito tendría escaso valor como prueba.
Demostrar que ya no había una relación sentimental entre ambos permitiría atenuar una posible condena para Nahir. Hoy, está acusada de "homicidio agravado por el uso de arma y por la relación de pareja", que contempla como pena la prisión perpetua.