En Salta, sólo el 3.33% del personal doméstico recibe aportes
De las 15 mil mujeres salteñas que se desempeñan en el servicio doméstico, solo 500 reciben aportes jubilatorios. Alrededor del 40% son madres solteras y más de la mitad no terminó el secundario.
Sociedad22/08/2014Más de 15 mil mujeres salteñas concurren todos los días -o varias veces por semana- a la casa de su “patrón” o “patrona” para realizar diferentes tareas domésticas. Hacen el papel de mamá, de abuela e incluso de terapeuta. Algunas conviven donde trabajan y esto implica no tener horarios ni otros compromisos externos. Hay viviendas donde son tratadas con cariño, como si fueran una integrante más de la familia, pero en otros casos reciben maltratos.
La mayoría proviene de barrios humildes, o de la interior de la provincia, y muchas son de localidades limítrofes, cerca del 40 % son madres solteras, es decir que son jefas de hogar con hijos a cargo y en más de la mitad de los casos, tienen el secundario incompleto.
Los últimos datos, aportados por el Ministerio de Trabajo de la Nación indican que esta actividad es la más realizada por las mujeres en todo el país.
En la provincia, según el Sindicato de Empleadas Domésticas, de cada 10 trabajadoras registradas dentro de las libretas de la AFIP solo 5 cuentan con los beneficios sociales y previsionales. Quiere decir que hay una gran deuda social de los empleadores que no cumplen con registrar a sus trabajadoras domésticas. La mayoría de las personas que trabajan en este sector no están inscriptas en las libretas de la AFIP por lo cual el nivel de precariedad laboral es aún mayor.
Desde el gremio que agrupa a estas trabajadoras, detallaron que las empleadas deben cobrar $12,50 la hora en caso de estar en blanco y tener un sueldo fijo, pero si la tarea es por horas esporádicas, $25. En el país, se estima que un millón de mujeres se dedican a esta actividad y sólo unas 200 mil posee aportes jubilatorios, vacaciones y obra social. Es la actividad que bate todos los récords de informalidad y precariedad.Los grandes centros urbanos concentran la mayor cantidad de empleadas, mientras que en nuestra provincia, son las ciudades de mayor población donde esta actividad se realiza con más frecuencia.
En el interior prácticamente no se realiza la actividad doméstica, que queda en manos de la “ama de casa” y sus hijos. En Salta Capital, se potencia la demanda por las necesidades económicas y la salida laboral de otras mujeres que necesitan que alguien las reemplace en los quehaceres hogareños o cuidados de los hijos.
Salta es la octava provincia con más trabajo doméstico irregular después de Misiones, Corrientes, Santiago del Estero, Chaco, Jujuy, Formosa y Santa Cruz, de acuerdo con datos de la Encuesta Anual de Hogares Urbanos realizada en 2013 por el INDEC.
Mariana Salas del Sindicato de Empleadas Domésticas dijo: “Alrededor de 3 mil personas están registradas en el sindicato, de más de 15 mil trabajadores del rubro en la provincia”. Además Salas, agregó: “En la provincia hay más de 1000 libretas entregadas a la AFIP, de ese porcentaje casi un 50 % está con aportes, por que los patrones se ven con la presión de la AFIP de hacerlo” y detalló que “hay muchas empleadas que están registradas y con la libreta en la mano pero no tienen los aportes correspondientes”.
También informó: “En todos los sectores es crítica la situación, pero en caso del servicio domestico es mucho peor, porque más del 40 % son madres solteras entonces con el sueldo de empleada no le alcanza para mantener la familia y tienen que salir a buscar otros trabajos paralelos. Esto hace que estén mucho tiempo fuera de sus casas, dejen abandonados a sus hijos, a su hogar y por esto le surgen otras problemáticas, que sus hijos se vean involucrados en el tema drogas, robos, entre otras cosas”.
A su vez destacaron que el sueldo que perciben por las actividades que realizan no les alcanza para vivir dignamente. “Es crítica la situación y más angustiante aun con la nueva escala salarial. Las próximas paritarias empezarían el 13 de septiembre, pero por el momento no hay aumento y es angustiante escuchar a las trabajadoras del sector decir que no les alcanza para darle de comer a sus hijos” comentó.
Con el objetivo de frenar un poco la precariedad laboral mencionó la importancia de registrarse en las libretas de la AFIP. “La libreta no las deja afuera de ninguna asignación, ni de ningún subsidio. Las libretas sirven para registrar a las empleadas y que se tenga un registro de los empleadores y exista un documento donde esté detallado el tiempo que trabajan, cuánto cobran, si reciben o no aportes, si le tienen las vacaciones correspondientes, si fueron despedidas”.
También, Salas, agregó que muchas veces las personas que trabajan en casas de familias “no saben leer o no terminaron ni siquiera la escuela primaria” y desconocen sus derechos. “Hay señoras que trabajaron muchos años y la estafaron en su buena fe, por lo cual le recomendamos que se acerquen al sindicato para que esto no siga pasando”.
Para finalizar detalló: “Lo que podemos festejar es que se erradicó totalmente a los menores de edad, ya que la nueva ley los prohíbe totalmente y eso se vio en la nueva escala salarial, que se sacó la categoría menores de edad. Además en el sindicato no hemos tenido casos de denuncias de menores trabajando en el sector”.
Fuente: Diario Punto Uno