Del total de nacimientos que se registraron el último tiempo en Argentina, el 85% fueron cesáreas practicadas en hospitales privados, y el 65% en el ámbito público. La cifra preocupa porque lo ideal sería que este tipo de cirugías no supere el 14%. Los datos, a partir de un informe del Ministerio de Salud de la Nación, fueron proporcionados por Coordinadora Argentina de la Red Latinoamericana y del Caribe por la Humanización del Parto y Nacimiento, Majo Bernasconi, en un entrevista con Central Policial por CNN Salta.
La activista por los Derechos de las Mujeres y los Cuerpos Gestantes habló además sobre la violencia obstétrica y recalcó que en la actualidad las mujeres que sufren este tipo de situaciones no saben dónde denunciar porque este delito “no está enmarcado dentro de lo judicial”. “Sólo se denuncia por los carriles administrativos”, remarcó.
Bernasconi también recomendó que las víctimas de la violencia obstétrica se acerquen a la Defensoría del Pueblo de la Nación a contar su situación. “La Defensoría abre un expediente y emite una resolución para la institución dependiendo cada caso. Lamentablemente en ningún caso hay un resarcimiento para la denunciante, ni un castigo para la persona o institución denunciada. Sin embargo, la denuncia sirve para dejar una constancia de lo ocurrido, para generar una estadística que sirva para impulsar políticas públicas y para que los causantes sepan que están denunciados”, detalló.
El parto respetado está enmarcado dentro de una ley que fue reglamentada en 2015. Establece, entre otras cosas, que la mujer esté acompañada durante el parto y que el bebé tenga contacto con ella desde el primer momento. Además la gestante puede elegir en qué posición quiere dar a luz y sobre todo nadie puede apurar el proceso del parto porque es un hecho involuntario.
“En pandemia tuvimos muchas denuncias porque las mujeres entraban solas a parir. Se entiende que estamos en una situación nueva, y que el personal de salud está en la trinchera pero también la OMS dice claramente que aun estando con COVID positivo, la mujer debe estar acompañada con una persona de su confianza, bajo protocolo”, finalizó la especialista.
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