En el primer día de la habilitación de la campaña de vacunación COVID-19 para menores de 12 a 17 años con comorbilidades, Valentina, de 15 años, se convirtió en la primera adolescente salteña en inocularse contra el coronavirus.
Con el uniforme del colegio puesto, Valentina, quien sufre de epilepsia, no ocultó su emoción por recibir la dosis de Moderna. “Ya tuve otras afecciones, me agarran convulsiones, estuve internada, y por eso mi familia me quiso traerme por el tema de la pandemia”, expresó.
“Se siente bien ser la primera, creo que va a motivar a algunos chicos, no se sintió nada, me puse nerviosa porque había mucha gente, me miraban todos, me hizo dar un poco de nervios pero todo bien, normal”, expresó.
La joven contó que fue su abuela, quien la ayudó a tramitar el turno, y la motivó a asistir al hospital Materno Infantil. “Ella me ayudó a sacar el turno, lo pedí el domingo y me dieron el lunes, pedí permiso en el colegio para venir, y me pude colocar la vacuna”, indicó.
En ese marco, les envió un mensaje a todos los jóvenes. “Les diría que lo hagan por ellos, es como una vacuna normal con la diferencia que puedan ayudar a gente, no solo nos ayudamos a nosotros sino también a la familia que es lo más importante”, sostuvo.
Seguidamente, Constanza, de 17 años, también señaló su alivio por acceder a la vacuna. “Lo hice no solo para ayudarme a mi misma sino a todos, mucho se dice sobre si es o no efectiva, algunos te quieren llenar la cabeza con cosas negativas acerca de la vacunación, pero mi familia me ayudó a tomar la decisión correcta”, dijo.
Por último, sostuvo que sus amistades también están ansiosas por vacunarse. “Todos tienen ganas de vacunarse, pero bueno, en esta oportunidad se priorizó a los jóvenes que están en riesgo”, concluyó.