La tan ansiada lluvia no llega y en Orán, con los incendios, la situación sigue siendo delicada. Si bien ya lograron controlar 2 de los 3 focos activos, la única forma de sofocarlos completamente es con precipitaciones. Se estiman que la perdida ya alcanzaría las 20 mil hectáreas.
Al respecto, Manuel Gutiérrez, jefe de Bomberos Voluntarios de la localidad norteña, detalló a Multivisión Federal que las llamas están sobre la ruta provincial N° 18, camino a Islas de Cañas; en Tinkunaku y en el Valle Morado.
“Dos focos importantes están controlados. Lo que no está controlado es en el Valle Morado, en el límite entre Salta y Jujuy. Yo digo controlados, porque sofocar es un poco más amplio. Controlar es para que no siga avanzando el incendio a las distintas comunidades, inclusive hay algunas escuelas y sofocar sería a través de una lluvia”, dijo.
En este sentido, indicó que si bien según sus estimaciones son más de 12 mil las hectáreas quemadas, los especialistas que están haciendo una medición cronometrada dicen que están llegando a las 20 mil, que posteriormente deberán ser reforestadas.
Consultado sobre si cree que se subestimó la gravedad de los incendios al principio, aseguró que “acá también la convocatoria, una vez que nos pasa la capacidad operativa, tendría que haber sido un poco más rápida, ojalá que tomen en cuenta todos estos detalles de forma que la próxima vez no nos suceda”.
Finalmente habló sobre lo que cuesta el equipamiento. “Todo lo que usa bomberos, como tiene que ser certificado y homologado viene del exterior, así que es carísimo. Para equipar un bombero para que vaya al fuego con un equipo autónomo, el traje estructural, bota y caso, estamos hablando de $600 mil pesos. Por ahí uno escucha, le dieron un subsidio de un millón, es para que se haya equipado dos bomberos nada más”, manifestó.
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