Hace 63 años que voto

Los recuerdos de estos años acuden en tropel, unos son propios, otros escuchados en los interminables fogones del campo, contados por sus protagonistas, algunas veces 100 % verdad otra con un alto porcentaje de exageración, como corresponde a todo cuento campesino. 

Allá por 1950, en la Prov. de Bs. As. por ejemplo, las cosas eran muy distintas a lo que son ahora. En el campo se “votaba” con el policía en la puerta de la escuelita, que siempre estaba al borde del “derrumbe”; palpaban de armas a los ciudadanos y les pedían amablemente que dejaran el facón en una mesa, algunos preferían dejarlo en el caballo – le tengo más confianza a mi caballo, que al milico – la cuestión es que la mesa destinada a los facones parecía de una armería. Algunas veces votaban – en serio -- otras le ponían el sello y le decían “bueno andá nomas, ya votaste” con la consiguiente retobada del paisano. Los políticos de la zona merodeaban los lugares de votación y amedrentaban a los votante – no te vas a equivocar, mirá que yo sé cómo viene la mano – y los pobres algunas veces creían y otras el puestito en la estancia pesaba más que todo lo que le habían hablado aquellos que querían modificar o por lo menos morigerar los abusos en los trabajadores. 

Hoy se vota con voto electrónico, le dan un comprobante impreso, que hay que guardar para justificar el voto, y la verdad es que si te equivocas es cosa tuya, el tema está claro y los que integran la mesa te ayudan, en caso de ser necesario. 

Durante el tiempo previo a los comicios, se pusieron a disposición de la gente un montón de máquinas para que los ciudadanos practiquen, con instructores muy amables que enseñaban que hacer y que no hacer, para no “meter la pata”.

No es nada complicado y se sale de la Escuela con la sensación de que todo es transparente, además de una inyección de EGO tremenda, porque estamos muy creídos que dominamos el ciberespacio provincial.
Así transcurren estas elecciones locales, ahora nos falta para completar el año las nacionales del 27 de octubre, y terminamos este 2013, con nuevas autoridades electas.

Que el Papa Francisco ilumine a sus conciudadanos y tengamos un año con paz y trabajo.

Fuente: www.informatesalta.com.ar