Las denuncias realizadas a Guillermo Durand Cornejo
La denuncia fue vista como una maniobra política por el legislador, pero situaciones de este tipo ya habían sido protagonizadas anteriormente por Durand Cornejo. Sus compañeros en el Concejo hablaron.
Sociedad18/09/2013Una mujer denunció el lunes que el diputado provincial Romerista, Guillermo Durand Cornejo, le tocó la cola en plena calle Deán Funes, frente a la AM 840.
La denuncia fue vista como una maniobra por el legislador, pero en abusos de este tipo, Durand Cornejo ya poseía antecedentes. Una denuncia por acoso sexual lo obligó a renunciar de su banca en el Concejo Deliberante capitalino en 1994.
Según la denuncia efectuada por una mujer, comerciante ambulante y que vive en el barrio Norte Grande, el diputado Guillermo Durand Cornejo, le tocó la nalga derecha, “en medio de la calle y con un montón de testigos”. El hecho se produjo frente a la emisora AM 840, en donde el legislador tiene su programa de ayuda al consumidor, lo mismo que su jefe político, el senador nacional Juan Carlos Romero, quien hace un par de semanas lanzó su espacio “Romero te escucha”. La denuncia fue radicada en la Comisaría 1ª, en donde la mujer afectada por el manoseo relató que “en calle Deán Funes 28, donde queda Radio Salta, un sujeto circulaba y que con la excusa de un tropiezo me tocó la cola”.
La mujer dejó constancia que cuando le preguntó por qué había hecho eso, esta persona le respondió: “Loca de mierda, gorda”. La denunciante, quien afirmó reconocer se trataba de Guillermo Durand Cornejo, agregó que tras insultarla ingresó a la radio, pero que luego salió con otro hombre, la vuelve a insultar hasta que cierran la puerta de acceso a la radio. Es por ello que se dirigió a la Policía, haciéndose presente con testigos del hecho y que vieron la situación. En el caso, interviene la Fiscalía Penal Nº 6.
Pero este supuesto abuso deshonesto por parte de Durand Cornejo no es nuevo en su vida. El primer problema que tuvo por su forma de relacionarse con las mujeres, data de 1988 cuando trabajaba en la delegación salteña del PAMI. Sonia Elizabeth Yañez dijo, en la declaración efectuada ante el juez de instrucción formal de Tercera Nominación, Carlos Badano, que “en 1988 fue acosada sexualmente con proposiciones deshonestas, las que continuaron en noviembre de 1989 teniendo testigos de la propia repartición”.
El escrito continua diciendo: “En 1991, y al no haber concretado sus propósitos, comenzó a amenazarla con el despido”, algo que lograría Durand Cornejo merced a sus influencias políticas. “Me gritó y me amenazó físicamente”, relató al borde de un ataque de nervios, esta mujer. La víctima agregó que el tres de abril de 1992, “Guillermo Durand Cornejo, intimó a la supervisora del PAMI, Graciela Laspiur, para registrar una sanción en perjuicio de la dicente”.
Los antecedentes registrados en los considerandos de la resolución del Juez Badano, citan una larga serie de testigos que corroboran lo denunciado por la empleada del organismo nacional. En base a estos antecedentes, Badano resuelve en el 1992 procesar a Guillermo Durand Cornejo por considerarlo “autor del delito de amenazas”, previsto y reprimido por el artículo 149 bis del Código Penal, a la vez que lo sobresee parcialmente de los delitos de coacción y abuso deshonesto. La Justicia no absolvió a Guillermo Duran Cornejo, ni tampoco fue sobreseído, sino que la causa proscribió, ya que “su expediente durmió durante años y nunca fue posible moverlo”, explicó un conocido letrado que estaba al tanto de la causa.
La pena a la que estaba procesado el legislador era de cárcel entre seis meses y dos años, pero excarcelable, una condena de ejecución condicional.
Problemas en el Concejo Deliberante
Las denuncias en su contra hicieron tambalear la asunción de Guillermo Durand Cornejo en el Concejo Deliberante capitalino. El viernes dos de diciembre, se tomaron juramento a los veintiún nuevos ediles de la ciudad, todos ellos electos en los comicios del tres de octubre de 1993. El acto inaugural se caracterizó por una gran y muy ruidosa presencia de barras políticas que fueron a brindarle su apoyo al titular de cuerpo, Carlos Arturo Comparada. Insultos y cantos, algunos sumamente ofensivos, obligaron a interrumpir en varias oportunidades el acto de asunción, pero una suspensión no se debió a la barra, sino al problema de Durand Cornejo.
La interrupción fue pedida por la Comisión de Poderes antes de la toma de juramento de los flamantes ediles y a raíz de la presentación de un escrito del hermano de Sonia Elizabeth Yañez, quien daba conocer al cuerpo el accionar del concejal durante su paso por el PAMI Salta. En ese momento se decidió seguir adelante con los actos programados.
Carlos Comparada, consultado, por entonces, por la prensa sobre el tema respondió: “No acarreará inconvenientes la aceptación del concejal Guillermo Durand Cornejo, por parte de la Comisión de Poderes. La Justicia nos investiga desde el momento en que somos candidatos, de modo que si superamos esa prueba, él estaba en condiciones de asumir el cargo”. A pesar de las declaraciones de Comparada, la Justicia siguió adelante con las denuncias.
Si bien ya habían desestimado las de acoso sexual, las de amenaza y coacción seguían en pie, lo que obligó a Durand Cornejo a presentar su renuncia seis meses después de haber asumido en el Concejo Deliberante capitalino. “Todos sabíamos sobre la denuncia, pero en ese momento en particular, por la fuerte situación política que se vivía, por el enfrentamiento entre el peronismo en el Concejo y el intendente Víctor Abelardo Montoya, dejamos pasar sus antecedentes en la Comisión de Poderes. Asume como concejal por una necesidad de coyuntura política, no porque la Justicia lo haya sobreseído”, explicó un ex concejal que pidió reserva de su nombre, porque “pueden pensar que estoy haciendo una movida política”.
Otro edil que compartió ese recinto en ese año, y que se negó a que publique su nombre en los medios, sostuvo “vi cómo trataba a la chicas de planta política del Concejo y la verdad es que siempre estaba pasado de vuelta con sus comentarios y actitudes. No me gustó”. El que sí se animó a hablar y dar su nombre, fue Gerardo Montaldi, también concejal por esos años. “Guillermo era compañero de banca de Adriana Pérez y una cosa que nos causaba risa era que en cada intervención, o conversación que teníamos con él, agradecía a Juan Carlos Romero y destacaba su fuerte y entrañable relación con Bettina”.
Montaldi explicó que “Guillermo tenía tanta muestras de agradecimiento, porque fue Juan Carlos Romero quien presionó a la Comisión de Poderes del Concejo Deliberante para que asuma cono edil, a pesar de la causa que tenía sobre su persona. Guillermo no debía asumir, pero Carlos Comparada, a pedido de Romero, nos pidió que no objetáramos su nombramiento”.
Al igual que varios ediles consultados, Montaldi coincidió en señalar que “Guillermo Durand Cornejo era despectivo y grosero con las mujeres que trabajaban en el Concejo. Siempre había rumores sobre supuestos avances poco decorosos sobre las chicas, pero todo quedaba en la nada. También era gritón e histérico en las sesiones. Muchas veces hacía escenas en el recinto y esto quedo plasmado en los diarios de sesiones del cuerpo, pero gracias a la gestión de Alejandro San Millán y Nora Giménez, que fue presidente del cuerpo, se perdieron las trascripciones de los años 1993 y 1994. Las notas, fundamentales para entender todo ese periodo convulsionado desaparecieron tras el plan de digitalización que impulsaban ambos y que quedó en la nada”.
La noticia en los medios
La causa penal no pasó desapercibida para los medios. En su edición del 4 de diciembre de 1993, el semanario Nueva Propuesta, titulaba en su página siete: “Flamante concejal acusado de acoso sexual y amenazas”.
El semanario señalaba en su copete que encabezaba la nota que desplegó en dos páginas, que “la presentación de una nota en el Concejo Deliberante, media hora antes que inicie la sesión, estuvo a punto de hacer fracasar el juramento del flamante concejal justicialista, Guillermo Durand Cornejo. A pesar del riguroso celo puesto por los funcionarios del Concejo, a fin de resguardar la intimidad su contenido, este fue conocido por la mayoría de los numerosos asistentes a la sesión preparatoria”.
Por su parte El Tribuno, en su edición del mismo días, titulaba: “El PRS votó dividido en el Concejo” y mencionaba en su segundo párrafo: …”un escrito mediante el cual un particular pretendió impedir la asunción del justicialista, Guillermo Duran Cornejo, pero el acto se cumplió en un clima de algarabía”.
Los que compartieron el concejo con Durand Cornejo Ese tres de diciembre de 1994, juraron como concejales por la Capital: Carlos Arturo Comparada, Juan Agustín Pérez Alsina, Eduardo Raúl Sángari, Reynaldo García Gambetta, Eduardo David Antonelli, Miguel Ángel Isa, Roberto Chávez Toledo, Adriana del Valle Pérez, Wenseslao Saravia Toledo, Edgardo Rubén Torres, Pedro Alberto Daza, Edgar Renan Castellanos, Gerardo Montaldi, Néstor Molinati, Eduardo Adolfo López, Ángel Eduardo Martín, Humberto Flores, Ernesto Saravia, María Silvia Varg de Nioi y Hugo Francisco Sosa Catala.
Fuente: Medios salteños