La abusó porque "no quería hablar", la insólita defensa del enfermero del Hospital Ragone

El caso ocurrió hace más de 7 años en el hospital Miguel Ragone, pero recién llegó a juicio la semana pasada. El acusado fue condenado a 1 año de prisión y también deberá hacer un curso para aprender a “revalorizar el rol de la mujer”.

En una audiencia de proceso abreviado, la jueza María Victoria Montoya, de la Sala II del Tribunal de Juicio, condenó a Walter José Ibarra, de 42 años, a cumplir una pena de un año de prisión por el delito de abuso sexual simple, hecho cometido el 16 de febrero de 2017, cuando compartía turno como enfermero con la víctima.

Según lo expuesto, a lo que tuvo acceso InformateSalta,  Ibarra, oriundo de Buenos Aires, hacía la recorrida por la Sala de Mujeres del hospital Miguel Ragone. Lo hacía junto a una compañera de trabajo, también enfermera, quien evidentemente no hablaba mucho, prácticamente nada.

Esto molestó al acusado, quien comenzó a hablarla y reclamarle por la falta de diálogo de su parte. La queja subió de tono, básicamente porque la víctima no le respondió, situación que llevó al imputado a acercársele e insistir en que debía contarle algo, que no “era sociable”.

Con gesto seco, la enfermera solo le contestó que no podía decirle nada, ya que estaba preparando la medicación para los pacientes, algo que, al parecer, Ibarra no hacía, ya que siguió con recriminándole su silencio, instancia en que decidió ir más allá y tras ponerse por delante, estiró su mano y le tocó la entrepierna a su compañera de trabajo.

La reacción de la víctima, obviamente, fue de sorpresa e indignación, seguida de un fuerte reclamo al acusado por lo que había hecho, haciéndole notar que, en ningún momento, le había dado confianza para ese tipo de trato, por lo que atinó a llamar a la jefa de servicio.

Denuncia

La responsable del área, que estaba en el sector de vestuario, se hizo presente y escuchó el relato de la víctima ante la mirada agresiva de Ibarra, quien nada dijo en su defensa, sino que se retiró de manera violenta, no sin antes reiterar que su compañera “no quería hablar” con él, supo InformateSalta. 

La víctima aclaró que su agresor no había intentado nada extraño previamente, por lo que el abuso sufrido fue algo inesperado. Denunciado el hecho, el caso fue investigado penalmente por la fiscal Luján Sodero, quien presentó ante la jueza Montoya un acuerdo de proceso abreviado dirigido a resolver el conflicto.

En ese marco, Ibarra confesó ser el autor del delito de abuso sexual simple, como así también prestó conformidad a la pena de un año de prisión condicional, al cual se le agregaron varias reglas de conductas, entre ellas el acusado fue conminado a someterse a un tratamiento psicológico a fin de controlar sus impulsos violentos.

Esto no esto, puesta también deberá realizar otro tratamiento que le ayuda a “revalorizar el rol de la mujer”. Asimismo, se le impuso una perimetral de 300 metros respecto a la víctima y abstenerse de la ingesta de bebidas alcohólicas y sustancias ilegales.