Buscan explotar "los túneles" de Salta, ¿qué dice la historia y qué posibilidad hay?

Fue a fines del mes pasado cuando trascendió el proyecto que ingresó al Concejo Deliberante, el cual propone armar una comisión que trabaje en la recuperación de los túneles históricos de la ciudad de Salta, esto para confirmar si existen, en qué condiciones estarían y si se pueden explotar turísticamente.

¿Existen los túneles? ¿Por dónde pasaban? ¿En qué estado se encuentran actualmente? ¿Se puede entrar a los mismos? Al respecto de estos interrogantes InformateSalta estuvo conversando con Matías Fusetti, periodista especializado en Historia y miembro del Instituto de Investigaciones Históricas Manuel Belgrano de la UCASAL, quien puso un manto de claridad a estas preguntas.

"El tema de los túneles en Salta fue siempre un misterio y leyenda a voces entre los habitantes de la misma, debido a la falta de información oficial", reflexionó primeramente rescatando que los mismos suben a escena en los últimos años, con el atractivo de los pasadizos de la iglesia San Francisco, que no son túneles efectivamente al estar en altura, no bajo tierra.

A esto contó que, cuando se fundó Salta en 1582, la misma estaba azotada por la presencia de malones de aborígenes y originarios. Es allí cuando "se crea un túnel que tenía como finalidad ser una vía de escape cuando los malones vinieran a amenazar la ciudad; así los habitantes, mujeres, niños y ancianos, poder refugiarse en el mismo", indicó sobre el más conocido y famoso de todos. Aquí, Fusetti hizo una aclaración respecto a la versión popular que "los curas se encontraban con las monjas en el túnel, eso es falso porque el convento San Bernardo funciona como tal desde mediados del 1800".

Sobre el recorrido de este 'túnel de escape', el periodista marcó en el mapa que una boca de ingreso es por el antiguo convento mercedario, es decir, partía desde la vereda norte de la escuela Zorrilla, sigue por Caseros hasta la esquina con calle Mitre donde quedaba la vieja iglesia jesuita; luego cruzaba en diagonal al Cabildo donde la historiadora Teresa Cadena de Hessling decía que había una entrada. El camino sigue hasta la iglesia San Francisco "donde tendría que tener otra boca de ingreso", hasta el convento San Bernardo "con una boca de salida", pues allí terminaba la ciudad y los habitantes podían refugiarse en el cerro.

"Existe el testimonio de ex docentes y autoridades de la escuela Zorrilla, como la historiadora María Irene Romero, que aseguran haberlo visto en la década del '90, cuando se estaba creando Casa Tía".

Consultado sobre el presente del túnel, Fusetti dijo que "el túnel, con el trayecto original como tal no existe", esto por décadas de desarrollo urbanístico y cloacal. "En la actualidad quedan pocos rastros, los accesos están tapeados, pero se podría romper la pared e ingresar, realizar análisis de carbono para saber con fecha certera a que año corresponde", consideró esa posibilidad.

Por último indicó que en Salta se podría "destapar en los pocos tramos que quedan, realizar un buen trabajo de ingeniera, arquitectura, para preservarlos y darle el valor que se merecen, así dejan de ser un misterio para todos", finalizó su exposición en la charla que tuvo con InformateSalta.