El Banco Central de la República Argentina cambió los plazos de pago para automóviles importados por tercera vez en el año. A partir de ahora las operaciones que en julio se abonaban a los 180 días de nacionalizar un automóvil hoy se pagarán a los 60 días, de acuerdo con una norma publicada en las últimas horas.
De esta manera, se adecuó al tiempo que ya tenían para pagar al exterior la mayoría de los bienes.
La reducción -progresiva- de seis a dos meses debería verse reflejada en un volumen mayor de unidades que entren al mercado, especialmente desde los países de la región con los que hay convenios de comercio con arancel 0% de importación.
Para las terminales que producen en el país pero además importan, y para los importadores netos, la medida mejora notablemente las condiciones financieras de sus operaciones, con las que tuvieron que lidiar en los últimos dos años.
Cuando comenzó la gestión del gobierno actual, la industria en general, y la automotriz en particular, había alcanzado un nivel de endeudamiento en el exterior que, a decir de los propios ejecutivos de las terminales que producen autos en Argentina, era el más alto de la historia. La falta de dólares del BCRA había llegado incluso a impedir que algunas empresas pudieran usar dólares propios, ya que para el gobierno de Alberto Fernández, esos fondos eran también parte de las reservas.
Los modelos que llegan desde Brasil, Colombia y México, sin arancel de importación, son los que tienen más beneficios con esta medida, que de todos modos impacta en todos los importados en general
Con la novedad de una nueva baja, ahora a 60 días, la tendencia seguirá en el mismo sentido, no sólo para las automotrices, que tienen esa cuenta corriente con casa matriz mucho más grande, sino también para los importadores puros que operan con dólares oficiales o dólares propios, y que dependían del plazo de acceso al MULC para cancelar sus importaciones.
“Es una excelente medida que va en la dirección que beneficiará a la gente. Esta nueva reducción de plazos a 60 días tendrá impacto en el mercado porque seguirá mejorando la oferta y por lo tanto el precio”, dijo este viernes Hugo Belcastro, presidente de CIDOA, la cámara de importadores de autos argentina.
“Bajar a 60 días nos acerca a los 45 días promedio que tienen el resto de los productos. Lo ideal es llegar en algún momento se pueda salir de esa obligación de pagar a determinados días después de nacionalizar. En cualquier país el acuerdo es entre privados y de ese modo se acuerdan los pagos”, reflexionó un ejecutivo de una de las principales automotrices argentinas.