En Orán trabajaron con puesteros de la Playa de Transferencia buscando alternativas y acompañamiento

Desde el inicio del proceso de cierre de la Playa de Transferencia, la Municipalidad de Orán mantuvo instancias de diálogo con los puesteros que desarrollaban actividades dentro de la playa de transferencias. A cada uno se le ofreció la posibilidad de reubicarse en ferias habilitadas u otros espacios acordes a la normativa vigente.

La mayoría de los trabajadores aceptó la propuesta y valoró el acompañamiento del municipio, que no solo brindó alternativas reales, sino que también garantizó la continuidad de su actividad.

Sin embargo, un grupo muy reducido decidió no acatar la medida, manteniéndose en conflicto y resistiendo la decisión que cuenta con amplio respaldo social. “Sabemos que toda medida de orden implica cambios, pero no podemos permitir que intereses políticos estén por encima del bien común”, remarcó un funcionario del Ejecutivo municipal.

Inversión privada con reglas claras

En paralelo al cierre de la playa de transferencias, dos playa de estacionamiento se encuentran funcionando en distintos sectores de la ciudad, desde donde continuarán desarrollando la actividad, esta vez bajo un esquema más ordenado y en condiciones normativas adecuadas.

Esta medida demuestra que existe espacio para la inversión privada, siempre y cuando se respeten las normativas municipales y se promueva un crecimiento equilibrado de la ciudad.

Desde la Municipalidad se reiteró que cualquier empresario que desee invertir en este tipo de espacios puede hacerlo, siempre que cumpla con los requisitos de habilitación establecidos.

Apoyo ciudadano y rumbo claro

La medida fue ampliamente celebrada por los vecinos, quienes manifestaron su satisfacción ante una decisión que venían reclamando hace años. La recuperación del espacio público y el fin del desorden en la calle Sarmiento fueron recibidos como una señal de que el municipio escucha, gestiona y actúa con firmeza.

Orán está avanzando hacia una nueva etapa, donde el orden, la planificación y la recuperación de lo público sean el eje central de la gestión. Con decisiones firmes, pero sostenidas en el diálogo, la ciudad construye un futuro más organizado, seguro y con oportunidades para todos.