Los hombres también tienen “sus días”

Los hombres también tienen sus días. Así es, aunque suene raro, ellos también tienen un ciclo hormonal. Si bien es muy diferente al de las mujeres, les ocasiona cambios en su estado de humor, entre otras cosas.

La testosterona, conocida como la hormona masculina, es responsable de algunas características físicas que diferencian a hombres de mujeres (barba, voz, espalda ancha, distribución de grasa y músculo) y juega un rol muy importante en la producción de espermatozoides.
Y precisamente, el ciclo hormonal masculino refiere a las variaciones en los niveles de testosterona durante un período de 24 horas.

Regularmente inicia con altos niveles de esta hormona por la mañana, que es cuando ellos pueden sentirse con más energía y con más deseo sexual, y termina a medida que avanza el día. Eso no quiere decir que no les guste tener intimidad en la noche, sino que su cuerpo está hormonalmente más estimulado por la mañana.

Sin embargo, algunos investigadores dicen que los hombres no tienen un ciclo hormonal.

Los hombres pueden tener bajos niveles de testosterona por otras razones, lo que ocasiona que se comporten de manera similar a las mujeres cuando tienen su menstruación (aunque también depende de su personalidad).

Las causas más comunes de esto pueden ser estrés, alguna pérdida significativa, depresión, una alimentación mal balanceada o el envejecimiento.

La ventaja que tienen ellos, en comparación con las mujeres, es que pueden ayudarse de diferentes maneras y evadir los síntomas más notorios.
Por ejemplo, hay alimentos que ayudan a elevar el nivel de testosterona en el cuerpo; hacer ejercicio también es una excelente opción.

Pero la solución que probablemente les gustará más es aumentar la actividad sexual, ya que se estimula la producción de esta hormona.

Si notas a tu galán un poco apagado, pensativo, de mal humor o simplemente diferente, pensá que tal vez “anda en sus días”.
Los hombres con sobrepeso son más propensos a tener niveles bajos de testosterona.

Si a usted realmente le interesa bajar de peso, tiene que limitar estrictamente la cantidad de azúcar procesada en su alimentación, ya que la evidencia señala que el exceso de azúcar, y la fructosa en particular, es el principal factor en la epidemia de la obesidad.

Por lo tanto, es esencial eliminar la soda de la alimentación, al igual que limitar la fructosa presente en los alimentos procesados, jugos de frutas, fruta en exceso y los llamados endulzantes “saludables” como el agave.

Fuente: Portal de Internet