Padres wichi no querían internar su bebé y debió intervenir la Policía
Pese a que estaba gravísima, los padres de la niña se negaban a que la trasladaran al hospital. Finalmente la criatura fue derivada a la capital, donde se recupera en el Materno Infantil.
Salud 24/12/2016La situación no fue fácil para un grupo de policías que, alertados por la gravedad de la salud de una bebé de un año de edad de una comunidad wichi, hizo todos los intentos para persuadir a los padres para que permitieran trasladarla al hospital. La pareja, muy joven y en condiciones de extrema pobreza, se negaba a que la criatura fuera internada.
La acción de los efectivos, encabezados por el comisario inspector Marcelo Domínguez, quien presta servicio en el destacamento de Coronel Juan Solá, estación Morillo (Rivadavia Banda Norte), le salvó la vida a la nena que hubiera fallecido indefectiblemente sin la atención médica. Esto impidió que se sumara a otros tres niños wichis menores de 5 años que en esta semana perdieron la vida por enfermedades evitables.
Cuando los policías reportaron el hecho, el fiscal Pablo Cabot, con la intervención de la defensora de menores Eugenia Hernández y el juez de Garantías, Fernando Mariscal Astigueta, ordenó el inmediato retiro de la bebé que presenta desnutrición, deshidratación y una infección gástrica y pulmonar. Una vez rescatada, fue trasladada e internada el hospital Materno Infantil de la capital, donde aún permanece con la asistencia necesaria para su recuperación.
Fue una supervisora de las escuela ubicadas a la vera de la ruta nacional 81 quien, recorriendo la zona a comienzos de esta semana, tomó conocimiento de que en la comunidad se encontraba una beba en grave estado y sufriendo dolores. Cuando comprobó el lamentable estado en que se encontraba, dio aviso al destacamento policial de Pluma de Pato
Sin la observación y comunicación inmediata y oportuna de la docente y la posterior intervención policial, la nena, llamada Camila, quizás hubiera tenido el mismo triste final de tantos niños de corta edad de comunidades originarias, que mueren porque llegan a situaciones extremas en las que pierden la vida.
"Rescatar a la chiquita llevó mucho tiempo, pero gracias a Dios, finalmente accedieron para llevar a la chiquita y trasladarla a Salta. Es muy difícil convencerlos porque sus creencias pueden más que cualquier razón, más aún si las explicaciones se las da un criollo", dijo una agente que participó del procedimiento.